La renovación de Francia

Con un claro rechazo a las clases políticas tradicionales, los franceses votaron a favor de Emmanuel Macrón y Marine Le Pen, candidatos que disputarán la Presidencia del país europeo en una segunda vuelta electoral.

Son dos campañas que se han hecho sobre ideas y modelos de gobierno que no reflejan los estándares partidistas tradicionales.

La ultraconservadora Marine Le Pen se inclina hacia una derecha radical, con propuestas que incluyen la salida de la Unión Europea y políticas migratorias restrictivas.

Por su parte, Macrón es defensor de la permanencia en la UE, está a favor de la globalización y de mantener el carácter abierto que ha caracterizado a Francia en asuntos de migración.

Quien resulte elegido deberá responder con determinación a desafíos como las amenazas terroristas, la incertidumbre económica, así como la crisis social y política que enfrenta esa nación.

Habrá que esperar a que los franceses decidan el próximo 7 de mayo si quieren que los gobierne el radicalismo de Le Pen o el centrismo de Macrón, y que esa elección no signifique un incentivo para el terrorismo que golpea a Francia.

En todo caso, cualquiera que sea el resultado, el país donde nació la democracia seguirá demostrando su respeto por los valores que quedaron claros con una participación del 78% de los votantes.