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Hora de decisiones

La escombrera de la Carrera 50 es como un cáncer para Cali que no se trató a tiempo, crece y crece mientras sus efectos se expanden sin control.

12 de junio de 2018 Por: Editorial .

La escombrera de la Carrera 50 es como un cáncer para Cali que no se trató a tiempo, crece y crece mientras sus efectos se expanden sin control.

A ese punto se ha llegado porque durante años, en vez de tomar las decisiones que se necesitaban, los responsables no han hecho nada diferente a pasarse la pelota de un lado para otro.

El resultado es esa montaña de desperdicios que ahoga a un sector importante de la ciudad, sobre la que no se ha querido actuar como corresponde.

Hasta el cansancio se ha recomendado que se reciclen las toneladas de materiales de construcción que a diario se depositan en el lugar, en vez de estar dando explicaciones y prometiendo cosas que no se cumplen.

Así se le daría solución al problema y de paso se crearía una nueva fuente de generación de empleo que podría beneficiar a cientos de familias.

Para que funcione no se necesita hacer grandes empresas; pequeñas industrias funcionan muy bien cuando se trata de reciclaje.

Esa salida se sigue ignorando, mientras se insiste en conseguir lotes fuera de la ciudad para trasladar los escombros, como única manera de enfrentar la situación, idea que además está sujeta a la anuencia de los municipios aledaños.

Ya es la hora de dejar el peloteo, tomar las decisiones que se necesitan y ponerle fin a ese mal que lleva ya tantos años causándole perjuicios a Cali.

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