¿Cuál perdón?

Rafael Correa, presidente del Ecuador, arremetió contra la prensa libre de su país y logró que un fallo judicial condenara al diario El Universo, a sus dueños y a un periodista a tres años de cárcel y a pagar US$40 millones. Ahora, Correa cambia de discurso de manera astuta y habla de ‘perdonar’ al diario, de condonar la deuda y de permitir el regreso al país de los dueños del medio.Detrás de esta pantomima no hay altruismo de su parte, y mucho menos preocupación por la continuidad del medio, sino el cinismo de quien produjo algo peor que una sanción cuyas dimensiones la convierten en un despojo.Correa sabe que ha puesto una mordaza a la prensa de su país, y que cualquiera que en el futuro ose cuestionar sus actuaciones recibirá el mismo tratamiento que tiene al diario El Universo ad portas del cierre.Peligroso antecedente para América Latina que se confiera a los gobernantes el poder para perseguir a quienes critican sus abusos.