Alianza perversa
Entre 1986 y 1994 una macabra alianza entre algunos militares y narcotraficantes le costó la vida a más de 342...
Entre 1986 y 1994 una macabra alianza entre algunos militares y narcotraficantes le costó la vida a más de 342 personas en Trujillo, municipio ubicado sólo a hora y media de Cali.Bajo el pretexto de que ellas supuestamente colaboraban con el ELN, las asesinaron, descuartizaron, despojaron de sus tierras y al final arrojaron sus restos al río Cauca. Ese fue el destino del párroco del pueblo, Tiberio Fernández, quien lideraba un proceso para reconstruir el tejido social en una zona históricamente golpeada por la violencia y que terminó siendo decapitado.Y aunque la condena de 44 años impuesta al mayor (r) del Ejército Alirio Antonio Urueña por su participación en el cruento episodio es un paso para encontrar la verdad, aún falta para que se esclarezca por completo y todos sus responsables paguen.Colombia no debe olvidar el daño que se produce cuando quienes están investidos por la autoridad se alían con criminales.