Siria y Turquía

"En Turquía los ánimos están exacerbados, aunque la mayoría de la opinión pública no se muestra partidaria de una guerra. Pero es un hecho que el régimen sirio ve en su vecino a un enemigo de su actuación criminal contra la oposición".

En hechos recientes y aún no satisfactoriamente explicados, un obús perteneciente a las fuerzas militares sirias cayó en la población turca de Akcacale, en la zona fronteriza, causando la muerte de 5 personas e hiriendo a 13 más.El incidente provocó una dura respuesta del Ejército y el Gobierno turcos que ordenaron una operación de bombardeo en el sector del territorio sirio desde donde se efectuó el disparo del proyectil. Adicionalmente el Parlamento autorizó a sus Fuerzas Militares para adelantar acciones punitivas en Siria, lo que se considera como el prolegómeno de una declaración de guerra. Con lo cual, la guerra civil se convierte en un conflicto internacional cuyas proporciones son difíciles de calcular. Más aún: Turquía pidió la convocatoria urgente del Consejo de la Otan. Éste manifestó su pleno respaldo a Ankara y exigió a Damasco cesar de inmediato cualquier acto de agresión. Al propio tiempo, según informa la prensa occidental, aún es prematuro aplicar el artículo 5 del Tratado de la Alianza. Dicho artículo prevé la posibilidad de una respuesta militar colectiva de todos los aliados a una agresión contra cualquiera de ellos.En Turquía los ánimos están exacerbados, aunque la mayoría de la opinión pública no se muestra partidaria de una guerra. Pero es un hecho que el régimen sirio ve en su vecino a un enemigo de su actuación criminal contra la oposición. En junio había derribado a un caza turco cerca de la frontera, aduciendo que éste había violado su espacio aéreo. Y aunque el asunto se zanjó por vía diplomática, la política de brazos abiertos conque Turquía recibe a los desplazados sirios, lo mismo que la organización de los movimientos de oposición a Al Bashar en ese país, ha convencido a los sirios de que Turquía es otro enemigo a combatir.Lo mismo sucede con Irán, soporte del Gobierno sirio, pero no así con Rusia que si bien valora los negocios hechos en Siria, considera mucho más importante la relación comercial con Turquía, de quien es el segundo socio después de Alemania.Y las cosas no se calman. Un nuevo ataque con mortero desde Siria al sur de Turquía provocó la inmediata respuesta del Ejército turco. El proyectil cayó en la provincia de Hatay, y hasta el momento no se han reportado víctimas. Así, el intercambio de incidentes entre turcos y sirios ya lleva 5 días seguidos con lo que una acción mayor parece inevitable.Debe recordarse que el primer ministro de Turquía ha estado promoviendo una zona de seguridad en Siria apoyada por la ONU, que aliviaría la carga de la crisis de refugiados acogidos por su país. Pero la comunidad internacional ha estado renuente, de manera inexplicable. Los actuales enfrentamientos en la frontera refuerzan la posición turca y muestran la justicia de su petición, lo que no es el agrado de las autoridades sirias.