¿Paciente terminal?

"...fue impactante escuchar al Vicefiscal, quien denunció un carrusel para asaltar la salud en Colombia. Tutelas falsas, muertos que aún reciben tratamientos costosos y organizaciones que se especializan en cobrar enormes sumas de dinero para las EPS o para particulares, fueron algunos de los delitos enumerados por el doctor Juan Carlos Forero...".

El pasado jueves se cumplió la cita para analizar el estado en que se encuentra el sistema de Salud en Colombia y los pasos dados por el Gobierno Nacional para cumplir con la sentencia T-760 de la Corte Constitucional, dictada en julio de 2008. A juzgar por las expresiones que en esa audiencia se le escucharon a la Fiscalía, a la Procuraduría y a otros participantes, la reforma estructural no da espera, así el Gobierno reitere que las dificultades no son tan graves como parecen. En su intervención ante la Corte, el Ministro de la Seguridad Social explicó que lo que está ocurriendo no es una crisis sino “una coyuntura por un problema de liquidez”. Al informar que el Gobierno ha dispuesto la inversión de dos billones de pesos para sanear la cartera del sistema y adecuar la red hospitalaria, el doctor Mauricio Santamaría afirmó que a finales de este año el país contará con un Plan Obligatorio de salud, POS, debidamente diligenciado. Con lo cual se resolverán gran parte de los problemas pese a los cuales Colombia presenta un “cubrimiento del 96% de la población”. Otro punto de vista expresó el Procurador General de la Nación, para quien una cosa es que se hable de un cubrimiento de por sí impresionante en cualquier país, y otra es la posibilidad real de tener acceso al sistema de salud. Según el representante del Ministerio Público, lo que existe es una crisis de fondo en el modelo de salud, que se ha atendido “con la expedición de normas y reglamentos que no profundizan en las soluciones, sólo se reducen a los aspectos superficiales y correctivos de la problemática. No se produce una adecuada normatividad coherente con los contenidos jurisprudenciales, que conlleve la capacidad de responder a los mismos compromisos estatales en la realización del derecho”.En idéntico sentido se expresaron Senadores y voceros de los gremios de la salud que reclaman porque se haga prevalecer el sentido de servicio público y atención al paciente por encima del afán de lucro y la necesidad de utilidades financieras. También se escuchó el reclamo casi unánime para que se termine la enorme red de intermediarios que se queda con el 25% de los recursos de la salud. Es decir, con nueve de los treinta y siete billones de pesos de los recursos públicos que cada año se dedican a atender un derecho esencial para los colombianos. Y fue impactante escuchar al Vicefiscal, quien denunció un carrusel para asaltar la salud en Colombia. Tutelas falsas, muertos que aún reciben tratamientos costosos y organizaciones que se especializan en cobrar enormes sumas de dinero para las EPS o para particulares, fueron algunos de los delitos enumerados por el doctor Juan Carlos Forero, frente a los cuales el Estado reacciona de manera tardía. Así las cosas, puede decirse que la radiografía y el diagnóstico sobre la Salud en Colombia ya existe. Y lo que resta es la iniciativa del Gobierno para cerrar las venas por donde sangra el sistema, así como las decisiones para poner las cosas en su sitio. Ojalá, el presidente Juan Manuel santos y su administración no se demoren en sanear lo que hoy es una de las grandes enfermedades de la Nación.