La salud de los océanos

"El mensaje que deja el informe es que los esfuerzos que se hacen en el país sobre sus 3.000 kilómetros de litorales -1.650 sobre el Atlántico y 1.350 sobre el Pacífico- se están quedando cortos. Y que de nada sirve vanagloriarnos por tener costas sobre dos océanos, por la belleza de sus paisajes y la riqueza en fauna y flora marina, si no los sabemos cuidar y aprovechar para que beneficien a ese 12% de la población colombiana que vive en las costas".

Enfermos con tendencia a empeorar. Así están los mares colombianos de acuerdo con el Índice de Salud de los Océanos, estudio que evalúa las condiciones de la fauna y flora marinas en cada país y la relación de los seres humanos con los recursos que proveen sus zonas marítimas. Los resultados deben ser punto de partida para establecer políticas públicas que permitan salvar y hacer aprovechables al Atlántico y al Pacífico.La medición fue realizada por 65 expertos de 30 universidades e instituciones como Conservación Internacional y National Geographic Society. El estudio se adelantó en 171 países y midió 10 variables que se resumen en conservación ambiental, oportunidades económicas, sociales y turísticas, desarrollo sostenible y relación de las comunidades con su entorno marítimo. El promedio de la salud mundial de los océanos fue de 60 puntos sobre 100. Colombia estuvo por debajo, con una nota de 52, lo que la ubica en el puesto 94 del ranking internacional. El informe revela varias sorpresas, entre ellas el alto puntaje en oportunidades para la pesca artesanal que se califica con un 85. Eso se traduce en una riqueza que debería beneficiar a quienes viven en las costas del país y pueden derivar su sustento del mar. En contraste, la provisión de alimentos apenas llega a 16 puntos, lo que significa que Colombia desperdicia sus riquezas marinas. La situación del litoral Pacífico es el mejor indicador: poblaciones sumidas en la pobreza habitando al lado del mar más rico, sin una industria pesquera artesanal organizada y sin generar oportunidades para desarrollarla. El otro ejemplo es el del turismo, donde el país obtiene un cero. Por supuesto la calificación no se debe tomar al pie de la letra, porque si en alguna zona se ha desarrollado esa industria es en el Caribe colombiano, donde se hacen esfuerzos importantes por posicionar destinos como Cartagena y San Andrés. Pero la realidad es que en comparación con el resto del mundo nuestro nivel sigue siendo muy bajo. Si se mira cómo está Colombia cuidando su biodiversidad marina, la calidad de las aguas de sus océanos y la protección costera, pasa raspando con puntajes que están entre 60 y 68 y se raja en la captura de gases de carbono con 51 puntos. El mensaje que deja el informe es que los esfuerzos que se hacen en el país sobre sus 3.000 kilómetros de litorales -1.650 sobre el Atlántico y 1.350 sobre el Pacífico- se están quedando cortos. Y que de nada sirve vanagloriarnos por tener costas sobre dos océanos, por la belleza de sus paisajes y la riqueza en fauna y flora marina, si no los sabemos cuidar y aprovechar para que beneficien a ese 12% de la población colombiana que vive en las costas. Esa es la razón por la cual el Pacífico es hoy el mayor generador de migraciones que llegan a las ciudades en busca de futuro.Establecer las políticas públicas que permitan conservar los mares con sus riquezas naturales, que generen una relación armónica y sostenible entre ellos y la población, y se conviertan en fuente de oportunidades para la gente, son los retos que tiene el Estado colombiano.