Un rolo al poder
Si hay un término que usan con tonito despectivo fuera de Bogotá...
Si hay un término que usan con tonito despectivo fuera de Bogotá es el de rolo. Quien te ha visto y quien te ve: un rolo sube a la Presidencia. El rolo nombró ministras a una bugueña y a una caleña, a María Fernanda Campo y a Mariana Garcés. Ellas la tienen difícil. En Mincultura hay unas poderosas roscas que imponen sus proyectos, sus vanidades y sus preferidas. En Mineducación hay unos sindicatos tan equivocados que tercamente atacaron a la eficiente Cecilia María Vélez; hasta llegaron a decirle la ministra pro imperialista.Sube al poder el nieto de Calibán y hermano de Felipe, Enrique y Luis Fernando Santos. Su tío Hernando Santos Castillo, un taurino de todas las horas, le diría el próximo sábado: Que sea la suerte, mataor. Y que tenga suerte porque es un potro salvaje la Presidencia y más aquí que tenemos guerrillos, paracos y miles de jóvenes pisto-locos.Siguen discutiendo si fue bueno o malo el gobierno de Uribe. Yo leo: 75% aplaude a Uribe. Qué exagerado, no es pa tanto, hubo errores gigantes. Pero mejor voy a la parte colorida de los que vamos a la posesión presidencial donde pueden darse siete osos peludos y nueve folclóricas situaciones. Armando Benedeti posesiona a Santos y me dijo antenoche que su discurso solamente dura 50 minutos. Le supliqué que lo rebaje a 15 porque todos tendremos afán de la copa de vino blanco.Las peluquerías oyen quejas a las no invitadas. Otras irán con lo mejorcito del clóset, a ver al príncipe Felipe de Borbón. Viene Cristina Kirtchner, la argentina que se cree Gardel, y también Evo Morales. Qué jartera Evo, le toca saludar a Uribe al que le ha lanzado insultos idiotas. Pobre Evo, viene desde Bolivia a un coctel y tres discursos sosos.Para quien se mueve entre señoras bogotanas, va a sus peluquerías, a cocteles y escribe en una revista femenina, es obligatorio ir a la posesión presidencial. Como me invitaron, voy. Es de buena educación ir con el gustico de no aspirar a ninguna chanfaina oficial. A los que buscan puesto diplomático les recuerdo que es de mala educación abrazar al Presidente en público. Y feísimo decirle: Usted sabe que estoy listo a servirle en el cargo que me designe.Menos amargo comentar la posesión de Santos que maldecir la piñata-loca de los automóviles blindados entre una centena de congresistas. Un amigo costeño comentó: Que no hagan tanto escándalo, si el senador pide tres autos blindados es porque tiene tres mujeres y eso es lo común en la Costa. Y todo, con los impuestos de ustedes. Un cómico país.