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Radiografía ambiental

En el comienzo el hombre era nómada, cazador, recolector y vivía en...

19 de noviembre de 2011 Por: Miky Calero

En el comienzo el hombre era nómada, cazador, recolector y vivía en completa armonía con los bosques, los ríos, los mares y las otras especies, un balance perfecto. Permanecía por un tiempo en determinado sitio y cuando los recursos se agotaban procedía a migrar a donde encontraba nuevamente provisiones frescas. De esa manera la intervenida área que dejaba atrás podía recuperarse y volver a su estado original. Eran tiempos en que seguramente ocurrían desastres naturales, pero nunca con la intensidad de estos tiempos.Posteriormente, nuestra especie descubrió la agricultura y empezó la Revolución Agrícola, interviniendo la madre naturaleza, secando humedales alrededor de los ríos para conseguir más tierra fértil. Cientos de miles de hectáreas de bosques son talados para dar paso a cultivos y ganaderías. En el Valle del Cauca a principio del Siglo XX se secaron ‘Madres Viejas’ del río Cauca y parte de la Laguna de Sonso para dar paso a la caña de azúcar. Los jarillones al lado de los ríos intentan contener las aguas que buscan sus sitios de reposo en invierno. Llega el negocio de los cultivos ilícitos que requiere muchas tierras donde sembrarlos. Con esta ‘revolución’ el hombre desafía la fuerza de la naturaleza sin medir sus consecuencias.Después llega la Revolución Industrial y la necesidad de crear una sociedad de consumo para alimentarla. Las fábricas sin ningún control vierten sus deshechos al agua y al aire. Nos volvemos dependientes del petróleo que mueve todo lo que nuestro ingenio inventa. Todo empieza a acelerarse, incluyendo la necesidad de volvernos miles de millones de habitantes para mantener el consumo que alimenta el aparato productivo y al sistema financiero. Otra ‘revolución’ que no tiene en cuenta el tiempo de las cosas y lo que requiere la naturaleza para encontrar su balance. La velocidad es lo importante y especialmente cuan rápidamente podemos engrosar nuestra riqueza bancaria. No importa que en el proceso destruyamos sin compasión.¿Y ahora qué? Vienen tiempos de reflexión donde hay que tomar decisiones drásticas para corregir la embarrada en que nos hemos metido. Algunos sostienen que es una nueva era, donde la conciencia colectiva va a generar un cambio positivo en nuestro comportamiento. Otros tienen una fe férrea que un Dios misericordioso nos va a salvar y traerá un nuevo sistema de cosas. Otros consideramos que el cambio comienza en nuestro comportamiento y en modificar nuestras costumbres para revertir el cagadón. Si seguimos como vamos la cosa se pondrá cada vez peor y llegará el momento que la vida sobre este hermoso globo terráqueo será insostenible.P.D. La recuperación del río Cañaveralejo va por buen camino, se empezó nuevamente la obra para poner la tubería y los colectores que van a descontaminarlo. ¡Qué viva Cali, Ciudad de las Aguas!