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Messi: un ejemplo de vida

Es desafortunado que las nuevas generaciones no entiendan que las cosas llegan con trabajo y dedicación.

6 de enero de 2023 Por:

Nunca había disfrutado tanto una final de un Mundial de fútbol como la última. Desde que tengo uso de razón, las finales de los mundiales son imperdibles, y las mejores y más emocionantes, son en las que juega Argentina. En el mundial de 1978, contra Holanda, con un Kempes grandioso, con goles agonizantes, más de poder y ganas que de habilidad.
En México 1986, con un Maradona inspirado, con pases y goles de la más pura habilidad. Y qué no decir de Italia 1990 o Brasil 2014, donde la Albiceleste perdió contra Alemania por la mínima diferencia. Lo cierto es que el partido fue electrizante de principio a fin. Una Argentina organizada, que le escondió el balón a Francia casi todo el partido. Una Francia que se recompuso y le dio vuelta al partido, por la visión de su técnico, con poder y ganas, y un Mbappé rápido, habilidoso y letal. Nuevamente un empate, de no creer.

Finalmente, los penaltis y Argentina campeón por tercera vez. Detrás de ese logro estaba Lionel Andrés Messi Cuccittini. Leo, o la pulga como le dicen cariñosamente, alcanzó el pináculo de su carrera. Muchos queríamos que ganara. Lo hizo en equipo, con sus compañeros, su técnico, su país y la mayoría de Latinoamérica apoyando. Fue la consagración de una vida de trabajo y dedicación. Claro que se deben tener condiciones, pero en la vida, como en el fútbol, el talento, sin trabajo y dedicación, llega hasta cierto punto. Leo llegó pequeño al Fútbol Club Barcelona, con problemas de crecimiento. Pero alcanzó el metro sesenta y nueve, suficiente para desplegar su talento.

Hoy en día es considerado el mejor jugador del mundo. Consiguió 35 títulos con el Barcelona, entre los que se incluyen 10 ligas, 7 copas del Rey y 4 Champions. Con la selección, consiguió una medalla de oro olímpica, una Copa América y un mundial. Su marca goleadora supera las 1000 anotaciones, con un promedio de 0,79 goles por partido. También tuvo momentos difíciles, especialmente en la Albiceleste, donde se decía que le quedaba grande la camiseta y nada iba a lograr. La realidad es que su vida profesional no es producto de la casualidad. Es producto del talento, las condiciones personales, el trabajo y la dedicación.

Es desafortunado que las nuevas generaciones no entiendan que las cosas llegan con trabajo y dedicación. Todos debemos pensar de esa forma, en la empresa y en la vida personal. Nada es gratis y sin sufrimiento. Cómo dirían los adagios anglosajones, “there is no free lunch” o “no pain no gain”, lo que traduce, no hay almuerzo gratis y no hay ganancia sin sufrimiento para alcanzar algo.

Qué alegría la que nos dio Messi. Su ejemplo de vida es inigualable, por el camino recorrido y lo alcanzado. Dicen que es humilde, sencillo y buen padre. Dicen que sus vicios son jugar al PlayStation y dormir. Su esposa es la de siempre, con la que lleva una vida tranquila y discreta, quien es su eterno amor, lo que dice, sin lugar a dudas, mucho de él. Gracias Lionel por la alegría y el ejemplo de vida.

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