El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Artículo

Mejores hijos para el Planeta

Ante tantos desafíos se requieren leyes que hagan que la responsabilidad por los efectos ambientales no sea una opción, sino una obligación real.

16 de febrero de 2020 Por: Juan Esteban Ángel

Con la llegada de Manolo, mi hijo, me planteo diversos propósitos para él. En las noches le digo cuánto deseo que tenga una vida feliz, que sea un hombre de bien, con profundo respeto por él mismo, por los demás y responsable con el planeta en el que vive.

Los incendios en Australia, las borrascas en España, las altas temperaturas de finales de 2019 e inicios del 2020 registradas como las más altas en la historia, la ‘bipolaridad’ del clima que hemos experimentado en las semanas recientes, son alertas de que este es un tema que nos tiene que importar a todos, desde niños.

Hace poco finalizó el Foro Mundial de Davos, en el que los más importantes gobernantes, empresarios, ONG y líderes sociales discutieron una vez más sobre cómo mejorar el mundo. No es gratuito que uno de los temas más cruciales haya sido la emergencia climática y que este año el Foro estrenara manifiesto con el objetivo de un mundo más sostenible. Incluso el mismo evento se declaró ‘verde’, prohibiendo utensilios de un solo uso, ofreciendo comida con proteínas ‘alternativas’, uso de energía renovable y lanzando una ambiciosa campaña para plantar o salvar un trillón de árboles.

Este año es determinante para el Planeta. Desde que surgió el término en la Convención Marco de las Naciones Unidas se ha hablado de declarar este el año de la justicia climática, con lo cual se pretende convertir en un tema ético y político, algo que hasta ahora ha sido un problema ecológico y económico; vendrá la COP26 que tiene el desafío de superar los resultados de sus conferencias antecesoras; se analizarán los logros y nuevos compromisos del Tratado Internacional sobre la Diversidad Biológica; y se cumple el primer lustro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ODS, donde gran peso de los análisis lo tendrán las metas medioambientales.

Para Colombia también se anticipan desafíos. Nos exigen plantear nuestro nuevo compromiso de reducción de emisiones de CO2 y tendremos los ojos del mundo puestos en nuestras políticas y resultados ambientales, cuando seamos por primera vez sede del Día Mundial del Medioambiente de la ONU, el próximo 5 de junio.

Ante tantos desafíos se requieren leyes que hagan que la responsabilidad por los efectos ambientales no sea una opción, sino una obligación real. Las normas deberán ir acompañadas del desarrollo e implementación de nuevas tecnologías del más alto nivel, en especial las que faciliten la transición energética hacia modelos 100% renovables; conservar y restaurar ecosistemas como la selva amazónica; desarrollar ciudades sostenibles con infraestructuras para movilidad alternativa como bicicletas y transportes masivos que desestimulen el uso del vehículo particular, y medidas que favorezcan y hagan más asequible el uso de vehículos eléctricos; entre otras estrategias para reconfigurar la política y el mercado en beneficio del Planeta.

Necesitamos individuos y familias conscientes del carácter finito de nuestros recursos y de la necesidad de adoptar prácticas de consumo responsables. Ciudadanos que prefieran y promuevan marcas con bajo impacto ambiental y que adopten un estilo de vida orientado a la sostenibilidad.

Manolo aún es un bebé, pero en mis manos está el compromiso de la educación y el ejemplo, para que crezca haciendo suya la responsabilidad de este estilo de vida que cuide el Planeta y asegure su descendencia.

Sigue en Twitter @Juanes_angel