Nuevo Opio del pueblo

Hacia el año de 1844, salía la traducción de la obra de Karl Marx : “contribución a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel”, en la cual se encuentra la frase: “La religión es el opio de los pueblos”; he querido hacer una reflexión al ambiente que nos han construido los medios de comunicación sobre el “mundial de fútbol”, que ha hecho pasar a segundo término si no es que ignoramos las cosas más importantes para nuestra existencia, como si el campeonato de fútbol con su fantasía de felicidad resolviera los problemas fundamentales del ser humano.Meses antes del inicio en tierras de Brasil, las gentes se manifestaban en contra de los elevados gastos para construir o remodelar estadios, mientras las gentes estaban sin respuestas del gobierno a las necesidades de movilidad, educación y otras, parecía que entorpecerían la realización de este sueño.Traigo a la memoria la idea central del llamado a la fraternidad del mensaje de año nuevo 2014 para la paz, del papa Francisco: “Hoy los pobres, los excluidos, los que sufren en nuestro mundo, tienen algo contra nosotros. Es nuestra falta de respeto por aquello que mas profundamente son, y somos: Hermanos”. La fraternidad es el fundamento y camino verdadero para la paz.Los medios de comunicación logran que un acontecimiento, como el mundial de fútbol nos acerque a todos, pero como dice el papa Benedicto XVI: “La globalización nos acerca pero no nos hermana”; si nos coloca a vivir de ilusiones y de fantasías de una felicidad que no soluciona los problemas fundamentales de la existencia; nos duerme la conciencia, y nos hace olvidar las angustias y dolores por los cuales está pasando la mayoría de los pueblos.Entendida en clave de medios de comunicación, la técnica que invade al mundo de hoy, y que hace una conexión casi instantánea con todos los habitantes del planeta, asumamos la frase pronunciada por Albert Einstein cuando dijo: “Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad. El mundo solo tendrá una generación de idiotas”.Pablo VI, en su encíclica : “Populorum Progressio”, entendía que el desarrollo de los pueblos tenía que ser integral, que abarcase toda la persona humana y a los pueblos, de lo contrario llegaríamos a la afirmación de Juan Pablo II que ante tantas desigualdades en la humanidad producidas por tantos y diversos factores, entre ellos el económico dijo entonces: “La paz es un bien común e indivisible: o es de todos , o no lo es para ninguno”.El periodismo que usa los medios de comunicación para informar al hombre, debe caminar en la Verdad, la Justicia y el Derecho, para que transmsitiendo la realidad, el hombre descubra los caminos que debe seguir para lograr la realización plena y digna y así ayuden a despertar la conciencia de fraternidad y convivencia entre los pueblos para cimentar el desarrollo verdadero e integral que nos traiga la paz verdadera.