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Los niños españoles juegan menos que antes, una hora y media diaria, según la Fundación Crecer Jugando. En Colombia pasa algo similar.

“El juego libre es esencial de la educación infantil, une en las tradiciones del grupo, sus valores y normas”.

American Journal of Play habla de “un descenso del juego y el aumento de la psicopatología”.

En los últimos 50 años el juego libre con otros niños se ha reducido de forma significativa y juegan poco entre ellos.

Al mismo tiempo los casos de ansiedad, depresión o sentimientos de indefensión han aumentado entre niños, adolescentes y jóvenes.

A menos juego, menor es la capacidad de vivir en plenitud la infancia.
Ante las pantallas pasan unas 30 horas semanales.

Según los padres a partir de los 7 años sus hijos prefieren los videojuegos o ver la televisión o la tablet.

Padres, el juego ayuda a desarrollar competencias, tomar decisiones, solucionar problemas, tener autocontrol, seguir reglas, manejar emociones y hacer amigos.
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