El pais
SUSCRÍBETE

El autogol uribista

La candidatura presidencial de Óscar Iván Zuluaga no despega. Así lo demuestra...

29 de noviembre de 2013 Por: Diego Martínez Lloreda

La candidatura presidencial de Óscar Iván Zuluaga no despega. Así lo demuestra la encuesta de Datexco que se divulgó anteayer, en la cual el candidato del Uribe Centro Democrático solo alcanza el 11,9% de las preferencias, frente al 36,1% del candidato-presidente Juan Manuel Santos.El estancamiento de Óscar Iván no sorprende, pues el exministro es un político poco conocido y gris que resulta muy difícil de ‘vender’. La prueba es que en un mes que lleva de candidato no ha hecho un solo planteamiento que haya impactado a la opinión pública. Podrá ser un estadista en potencia y tener mucha experiencia, pero si no se hace elegir, está frito.Esta situación demuestra que el uribismo cometió un gravísimo error, casi un suicidio, al elegir a Zuluaga como su candidato a las elecciones presidenciales. Y no solo por la forma en la que lo escogió que fue, por decir lo menos, sospechosa. A Francisco Santos le asiste toda la razón al estar indignado con la encerrona que le montaron para sacarlo del ring: una convención organizada en dos semanas, con el único propósito de neutralizarlo.Fue tan burdo el montaje que al final ni siquiera tuvieron la delicadeza de dar a conocer las cifras de la presunta votación y se limitaron a anunciar los porcentajes que sacó cada uno de los candidatos. Quiero creerle al expresidente Uribe cuando afirma que él no intervino de ninguna forma en el resultado de esa convención. Y que lo ocurrido fue producto, como piensa Pacho, de una emboscada de la “maquinaria uribista” que no le convenía tener como candidato a un hombre autónomo y que no se deja manejar. Pero más allá de cómo se llegó a esa escogencia, lo cierto es que los hechos y las encuestas están demostrando que el uribismo se equivocó al escoger a Óscar Iván. Por la sencilla razón de que Pacho Santos era mucho mejor candidato. Yo no sé si al exvicepresidente la gasolina le hubiera alcanzado para derrotar a su poderoso primo. Pero de lo que sí estoy seguro es que hubiera dado mucho más guerra que la que va a dar Óscar Iván.Pacho es un tipo carismático y aunque en los estratos altos no se lo toman muy en serio, les sabe llegar a las clases medias y al pueblo. Mejor dicho, además de que la gente lo identifica plenamente con Uribe, tiene virtudes que Juan Manuel Santos no posee y representa una alternativa clara y real frente al actual Presidente. La prueba de que su campaña iba por buen camino es que en la última encuesta conocida antes de que lo defenestrarán quedaba en primer lugar. La salida de Pacho de la disputa por la Presidencia no solo fue un autogol del uribismo sino una lamentable pérdida para la contienda electoral que, sin duda, hubiera sido mucho más interesante y picante con su presencia.¿Que era impresentable una contienda Santos contra Santos? Esa circunstancia anecdótica hubiera quedado sepultada por la avasallante realidad de que el parecido entre ambos personajes se limita a los apellidos. Y por lo tanto, insisto, Pacho constituía una opción interesante para quienes no desean reelegir al actual Mandatario. En cambio, como quedaron las cosas, a los electores nos va a tocar escoger entre dos matices de gris: el gris capitalino de Juan Manuel y el gris grecocaldense de Óscar Iván.

AHORA EN Diego Martinez Lloreda