Bolero inmortal

El pasado 5 de diciembre, en Botswana - África, en el marco de la décima octava reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, el Bolero fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad (PCI) por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura - Unesco.

Delegaciones de 181 países evaluaron esta solicitud titulada ‘Bolero: Identidad, emoción y poesía hecho canción’, presentada mediante un expediente binacional por México y Cuba, los cuales ya tenían este género musical inscrito en sus listas nacionales de patrimonio; y se unieron a través de la Secretaría de Cultura de México y el Ministerio de Cultura de Cuba - país al que se le atribuye el origen de este género-, para defender su ingreso a la lista representativa más importante de las manifestaciones culturales del mundo.

México y Cuba, países con una tradición de bolero que data del Siglo XIX, han sido cuna de grandes boleristas que le han dado esplendor a este ritmo cadencioso y romántico que le canta al amor y al desamor y que continúa el sendero de declaratorias de ritmos musicales afincados en la identidad de los países, como la música de mariachi en México, el vallenato en Colombia, el flamenco en España, el tango en Argentina y el reggae en Jamaica, entre otros.

El bolero se escucha, se canta y se baila en toda América Latina y con el paso del tiempo, en su fusión con otros géneros, ha permitido el surgimiento de otras manifestaciones afines o ‘subgéneros’ como el bolero son, el bolero- chacha, el bolero mambo, el bolero ranchero y el bolero moruno, entre otros. De una u otra manera todos hemos sido influenciados por el bolero, bien sea porque era música obligada de padres y abuelos, o por su incursión en la radio, en el cine, las serenatas o las viejotecas. Baladistas, salseros y cantantes de diversos géneros lo han incluido en sus repertorios, como es el caso de Luis Miguel, Raphael, Gilberto Santa Rosa, Willie Colón, Cheo Feliciano, Andrés Cepeda, Monsieur Periné y Natalia Lafourcade, entre muchos otros, que no se han resistido a los misterios del bolero.

En Cali, Carlos Córdoba - director de Boleoro es uno de estos músicos jóvenes que mantiene vivo el Bolero con sus composiciones y también con la interpretación de las melodías originales que inmortalizaron voces como las de Javier Solís, Agustín Lara, Toña La Negra, María Dolores Pradera, Omara Portuondo, Celia Cruz, Lucho Gatica, Tito Rodríguez y muchos más. Por su parte, Edgar y Yolanda, los reyes del bolero, mantienen viva la tradición en nuestra ciudad, con su Club del bolero, sus clases, su festival y su baile.

El Encuentro de Melómanos y coleccionistas de la Feria de Cali en su edición del presente año y el circuito de festivales del bolero de Colombia, con Caicedonia por el Valle del Cauca y otras ciudades como Riohacha, Pereira y Barranquilla, se preparan desde ahora para celebrar esta declaratoria; pues como dijo Gabo -quien declaró el bolero uno de sus géneros musicales preferidos- “Hablar de música sin hablar de los boleros es como hablar de nada”.