Los talentos
Hoy nos habla el Evangelio de los talentos que el Señor da...
Hoy nos habla el Evangelio de los talentos que el Señor da a cada uno, y de la forma cómo algunos los aprovechan y otros los entierran, vale la pena preguntarnos cada uno si hemos sido capaces de hacer fructificar los dones que hemos recibido a través de la vida. Pero si a nivel personal este autoexamen es importante, lo es también y en alto grado, la necesidad que tiene la sociedad de examinarse. Los valores y principios que sembraban la familia y la educación producían los frutos del respeto a la vida, a los mayores, a las autoridades, a los demás. ¿No será que enterramos todo aquello?En la educación, da la impresión de que hoy no se forma solamente se informa ,es decir se trasmiten conocimientos y eso con el menor esfuerzo posible, para eso está el compu, (como dicen los muchachos hoy) herramienta que puede ser valiosa pero que se ha convertido en el refugio para el menor esfuerzo. Los profesores lo comprueban en los trabajos que sus alumnos les presentan.Los bochornosos episodios del estadio, la creciente inseguridad, los escándalos de deshonestidad y corrupción son muestra clara de que se enterraron los talentos.Es bien preocupante el horizonte que avizora nuestra sociedad, nuestra Patria, sino se pone un correctivo oportuno. Las políticas de estado tienen que entender que no es solo el bienestar económico lo que hace el desarrollo, mientras no se cultiven los principios y valores, ni la educación es solo trasmitir conocimientos sino formar en los principios para que el joven aprenda a no confundir, la igualdad con el igualitarismo, la libertad con el libertinaje. Hemos recibido grandes talentos no los enterremos.