El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Artículo

¿Mucho pedir?

Emcali debería estar estructurando y construyendo la solución para el suministro de agua potable en el sur de la ciudad.

14 de febrero de 2021 Por: Vicky Perea García

Desde hace más de 8 años se ha evidenciado la necesidad que tiene Cali de contar con una nueva fuente de agua potable. No sólo para garantizar el abastecimiento de la ciudad en momentos de alta turbiedad del río Cauca, sino también para garantizar los procesos de expansión de la ciudad hacia el sur.

Las posibles soluciones son innumerables y variadas. Traer agua de Salvajina, desviando mediante túneles alguno de los ríos del costado occidental de la cordillera; la construcción de represas en los ríos Palo o Timba; incluso la construcción de pozos profundos. También la más simple de todas, la construcción de otra boca toma en el río Cauca a la altura del lugar conocido como La Balsa a unos pocos kilómetros de la desembocadura del río Timba.

En febrero de 2019 fue anunciado con bombos y platillos por parte de la CVC los resultados del estudio de factibilidad del nuevo acueducto de ‘La Balsa’. Sin embargo, por los avances que ha tenido el proyecto, pareciera que el anuncio respondía más a una batalla política entre la Gobernación del Valle y la Alcaldía de Cali, por quién se quedaba con el proyecto de suministro de agua potable en el sur de la ciudad. La realidad del anuncio era que el proyecto pasaba a etapa de diseños definitivos, pero no se contaba con los recursos para llevar a cabo esos diseños. Aunque se anunciaron líneas de crédito con el BID, hasta la fecha no se han materializado ni los empréstitos, ni contratado los diseños definitivos.

¿Acaso se solucionó el tema de abastecimiento de agua? Evidentemente la respuesta es negativa. La coyuntura climática ha jugado a favor de nuestra ciudad y al menos en los últimos años, no se ha padecido de cortes continuos de agua, dando la falsa sensación que el tema se solucionó. Sin embargo, los trámites para lograr licencias de construcción por falta de disponibilidad de agua potable han hecho que muchos de los planes parciales se encuentren detenidos, afectando el desarrollo de nuestra ciudad.

Me pregunto qué piensan el gerente de Emcali y su Junta Directiva de todo esto. La situación financiera vulnerable de Emcali no es un secreto para nadie. De sus tres negocios principales, telecomunicaciones, energía y acueducto, el único que no presenta amenazas reales a su monopolio es acueducto. Los directivos de la empresa de servicios públicos parecen olvidar esto último pues están más preocupados en los temas conceptuales del objeto social de la compañía que en la estructura real del negocio. Están más interesados en ver cómo entrar a opera la recolección de las basuras o incursionar en la generación de energía, sectores ambos bien competidos y donde Emcali no tiene experiencia, en lugar de asegurar el monopolio del agua potable para Cali y sus municipios vecinos. Es un monopolio natural en el cual debe invertir para protegerlo y así poder garantizar la sostenibilidad de la empresa a futuro.

Emcali debería estar estructurando y construyendo la solución para el suministro de agua potable en el sur de la ciudad. Debería estar aprovechando la no necesidad de realizar cortes de agua para lograr entregar una solución permanente a esta amenaza. No debemos esperar a que llegue la temporada seca para sentar las bases de la discusión sobre el futuro del suministro de agua para Cali. Es una solución que requiere tiempo y planeación. ¿Será mucho pedir que se adelanten a una problemática que es una bomba de tiempo?