El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Mundo

Artículo

Ya son 76 las víctimas mortales que dejó Sandy en el noreste de EE.UU.

Reanudación de operaciones en su tren subterráneo, calles congestionadas por el tráfico y reapertura de los principales aeropuertos, es el panorama este jueves en la ciudad de Nueva York, tres días después del paso de 'Sandy'.

2 de noviembre de 2012 Por: Elpais.com.co | Resumen de agencias

Reanudación de operaciones en su tren subterráneo, calles congestionadas por el tráfico y reapertura de los principales aeropuertos, es el panorama este jueves en la ciudad de Nueva York, tres días después del paso de 'Sandy'.

El Gobierno de Estados Unidos dijo este jueves que ha aprobado más de 3,4 millones de dólares en ayuda directa a más de 36.000 damnificados por la en los estados de Nueva Jersey, Nueva York, y Connecticut.Así lo informó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en declaraciones a los periodistas que acompañan al presidente Barack Obama en su gira por Wisconsin, Nevada y Colorado.Esos recursos otorgados por el Gobierno federal incluyen ayuda de vivienda y recursos para "apoyar las necesidades inmediatas", señaló Carney.Agregó que Obama tiene previsto continuar sus conferencias telefónicas con autoridades locales en las zonas afectadas "para asegurar que se entregan los recursos federales disponibles" para ayudar en los esfuerzos de reconstrucción.La cifra de víctimas mortales a causa del huracán 'Sandy' en Estados Unidos aumentó a al menos 76, según informaron los medios locales, mientras continúan las reparaciones de tendidos eléctricos y los aeropuertos comienzan a retomar la normalidad.Al menos 37 personas han muerto en la ciudad de Nueva York a causa del devastador paso del huracán 'Sandy' por la costa este de Estados Unidos, según anunció hoy el alcalde, Michael Bloomberg, quien advirtió de que el número puede seguir aumentando.A falta de un recuento oficial federal, el balance de la cadena CNN elevó a 76 la cifra de víctimas que incluye al menos 12 en Nueva Jersey y 10 en Maryland, entre los que hay varios niños.Bloomberg recordó que la policía y los bomberos seguirán visitando "puerta por puerta" las zonas más afectadas para ver si hay más víctimas y si los habitantes de cada vivienda tienen necesidades concretas.De momento, la Guardia Nacional distribuirá un millón de comidas preparadas y millones de botellas de agua potable en las quince áreas de la ciudad más afectadas por la tormenta hasta el fin de semana.Los clientes de Con Edison en los barrios neoyorquinos de Manhattan y Brooklyn volverán a tener electricidad el próximo sábado, pero el Bronx, Queens, Staten Island y el condado de Westchester, algunas de las áreas más afectadas por el paso de 'Sandy', no la recuperarán hasta dentro de 10 días.Así lo explicó la portavoz de la compañía eléctrica, Sara Banda, quien aseguró que restablecer el suministro en esas áreas es más complicado que en Manhattan y Brooklyn porque el sistema no es subterráneo y las caídas de árboles y líneas eléctricas hacen que el trabajo "no sea fácil".De esta forma, la empresa estima que hasta los días 10 y 11 de noviembre sus clientes de los barrios neoyorquinos del Bronx, Queens y Staten Island y el condado de Westchester permanecerán a oscuras.Poco a poco Nueva York regresa a la normalidadLa ciudad de Nueva York dio un importante paso hacia la recuperación de su ritmo frenético con la reanudación de operaciones en su tren subterráneo tras el paso de la supertormenta 'Sandy', a pesar de que las acciones de limpieza en otras partes apenas han comenzado. La decisión de reabrir este jueves las partes no dañadas del sistema de transporte más grande de Estados Unidos fue adoptada mientras la región afectada se esforzaba por reponerse de una tormenta que causó la muerte de más de 140 personas desde que pasó por el Caribe y dejó sin electricidad a más de cinco millones tan sólo en Estados Unidos. Dos de los principales aeropuertos de la región abrieron el miércoles y las autoridades prometieron que un tercero, el Aeropuerto LaGuardia, volvería a funcionar el jueves. Los actores y las audiencias ansiosas hicieron resurgir a los teatros de Broadway. Y los neoyorquinos atestaron los autobuses que regresaron por primera vez a las calles de la ciudad desde que pegó la tormenta, y penetraron a un tráfico congestionado que recorría la ciudad entre semáforos sin funcionar. El corredor ferroviario de la empresa Amtrak en el noreste, el más utilizado del país, transportaría de nuevo a los pasajeros por esa zona densamente poblada a partir del viernes. Pero centenares de personas debieron formar fila para esperar los autobuses; los vehículos se aglomeraron en filas de varios kilómetros (millas) , e igualmente fue necesario hacer colas muy largas para cargar gasolina. Y cientos de miles de habitantes, tan sólo en la ciudad de Nueva York, carecían aún de energía, particularmente en el Bajo Manhattan, que siguió en penumbra apenas al sur del rescacielos Empire State, luego que las inundaciones dañaron la infraestructura eléctrica. A lo largo y ancho de la región, las personas agobiadas por la tormenta se apoyaron mutuamente, en algunos casos para dar consuelo a los damnificados y en otros para ofrecer duchas calientes e interruptores eléctricos con el fin de que las personas sin electricidad pudieran cargar sus teléfonos celulares. El espíritu del compañerismo voluntario llegó hasta los políticos, que al menos aparentaron dejar de lado sus diferencias para concentrarse en las secuelas de Sandy. "Aquí estamos por ustedes", declaró el presidente Barack Obama en el estado de Nueva Jersey al recorrer un litoral devastado. "No vamos tolerar el papeleo. No vamos a tolerar la burocracia".Obama se unió al gobernador republicano Chris Christie, quien ha sido uno de los simpatizantes más estridentes del candidato presidencial republicano Mitt Romney, para recorrer la costa asolada. Los dos políticos sólo hablaron de ayudar a los perjudicados por el meteoro. La actitud de compañerismo ya había comenzado el miércoles, cuando multitudes de personas caminaron hombro a hombro por el puente de Brooklyn hacia Manhattan para ir a trabajar, en una escena que evocó la huida del ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001 y del apagón de 2003, sólo que en sentido contrario. Llegaron a una isla donde mucha gente tomó como un problema personal la falta de electricidad, de agua y de transporte. De una toma de agua en la calle 16 Oeste, la niña Shiyin Ge, de 9 años, y su hermano Shiyuan Ge, de 12, hacían fila para llenar cubos de agua. Sin embargo, a diferencia de los adultos, los dos menores llevaban recipientes de plástico para caramelos de la Noche de Brujas pintados con caras alegres talladas en calabazas. "No hay agua en nuestra casa", dijo Shiyin Ge, quien tenía pensado disfrazarse como mariquita para la Noche de Brujas. Luego de sufrir el peor desastre en sus 108 años de historia, el metro volvía a funcionar... al menos algunos de sus trenes. Más de una decena de líneas ofrecerían algún servicio, pero ninguna más abajo de la calle 34 de Manhattan, una línea que separa a los habitantes más duramente golpeados de los que escaparon de la peor parte. Daños económicos a causa de 'Sandy'Las estimaciones sobre los daños económicos del huracán Sandy en Estados Unidos siguen al alza y se ubican ahora entre los 30.000 y 50.000 millones de dólares, mientras continúan las labores de limpieza y los estados más afectados de Nueva York y Nueva Jersey luchan por volver a la normalidad.Los datos corresponden a los cálculos realizados por la firma de evaluación de costes IHS Global Insight en un informe divulgado este jueves que los sitúan muy por encima de las estimaciones iniciales.Como principales factores, los economistas de la compañía sitúan "la parálisis de la actividad económica y los daños causados en propiedades aseguradas y no aseguradas".El diario The Wall Street Journal calcula que las aseguradoras tendrán que asumir un gasto de 20.000 millones de dólares.A ello, también habría que añadir las pérdidas generadas por la ralentización de casi el 70% de las refinerías de la costa este y el cierre comercial en la región durante dos días.En total, estos costos podrían representar entre el 0,2 % y el 0,3 % por ciento del Producto Interior Bruto, PIB, nominal de Estados Unidos, aunque reconocen que quizá algo serÍa compensado por la actividad económica que generarían las labores de reconstrucción.

AHORA EN Mundo