Protestas en Chile dejan más de 800 estudiantes detenidos

Los estudiantes pidieron al gobierno chileno una rápida solución para crisis educativa que presenta el país, ya que son más de 200.000 estudiantes que están en paro académico.

El gobierno chileno informó este viernes que 874 personas fueron detenidas y 90 policías resultaron heridos durante las protestas estudiantiles que se extendieron por todo el país y que derivaron en un masivo y sonoro "cacerolazo", saqueos y extendidas barricadas.Los alumnos secundarios y universitarios mantienen desde hace más de dos meses una movilización que incluye tomas de escuelas, paros, huelgas de hambre y marchas en demanda de cambios profundos al desigual sistema de enseñanza del país.El vocero oficial del gobierno, Andrés Chadwick, primo del presidente Sebastián Piñera, defendió la acción policial, que incluso como pudo observar la prensa reprimió a grupos de pacíficos ciudadanos que salieron a la calle la noche del jueves a golpear cacerolas en señal de protesta.Este viernes Santiago mostraba los vestigios de las barricadas ubicadas en diversos puntos de la ciudad y de los incidentes que se produjeron cuando la policía reprimió con chorros de agua y gases lacrimógenos a los miles de jóvenes que intentaban marchar por el centro capitalino desafiando una prohibición del gobierno."Nosotros sabíamos que al colocar límites se iban a producir manifestaciones en el entorno, pero creo que hay veces que la autoridad tiene que demostrar que también está protegiendo el derecho de todos", dijo Chadwick.El "cacerolazo", una protesta muy usada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), se repitió en diversos barrios de la capital y también en algunas provincias. En Santiago se escuchó incluso en los barrios acomodados. Según una encuesta privada divulgada el jueves, Piñera registra un nivel de rechazo de 53% en todo el país.El conflicto estudiantil, que comenzó hace dos meses, mantiene paralizadas una serie de universidades y parte de los colegios municipales de enseñanza media. Según el ministro de Educación, Felipe Bulnes, son 200.000 los estudiantes que se encuentran paralizados.El gobierno advirtió que tomará medidas para normalizar la actividad y permitir que los alumnos afectados y que no participan de la protesta puedan volver a clase."Me voy a encargar de que ellos tengan oportunidades para no quedar cautivos por la decisión de otros", dijo Bulnes este viernes.Agregó que el gobierno enviará al Congreso proyectos sobre aspectos del régimen educativo que está dispuesto a modificar. El gobierno había entregado el lunes una propuesta de 21 puntos a estudiantes secundarios y universitarios y al Colegio de Profesores que debía ser respondida este viernes.Pero luego de que el gobierno prohibiera las marchas convocadas para el jueves y ordenara la represión de los manifestantes, los estudiantes anticiparon su rechazo a la propuesta y dieron a las autoridades un ultimátum de seis días para entregar una nueva propuesta que responda a sus demandas de mejor educación y el término del lucro y la dependencia municipal de los colegios de enseñanza secundaria.El presidente de los estudiantes de la Universidad Católica, Giorgio Jackson, declaró a radio Cooperativa que una salida posible al prolongado conflicto sería un plebiscito para determinar las reformas que necesita el sistema educativo. Dijo que si las autoridades no logran alcanzar un acuerdo con los estudiantes "no hay otra salida que el plebiscito, sobre todo por el tema de la paz social".Jackson señaló que el "cacerolazo" también fue una manifestación de rechazo a la forma en que el gobierno ha ejercido su autoridad.