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El drama de los civiles que sufren la guerra del EI alrededor de Mosul

La utilización del humo con fines estratégicos en la guerra, las máscaras especiales y la tecnología que disponen las fuerzas iraquíes, dejan efectos nefastos en las personas que están en medio del conflicto.

24 de octubre de 2016 Por: Elpais.com.co / AFP

La utilización del humo con fines estratégicos en la guerra, las máscaras especiales y la tecnología que disponen las fuerzas iraquíes, dejan efectos nefastos en las personas que están en medio del conflicto.

El espeso humo de los incendios provocados por el grupo yihadista Estado Islámico EI para protegerse de los ataques aéreos ha teñido de negro el cielo del norte de Irak, creando un dramático telón de fondo en la ofensiva contra Mosul.

La utilización del humo con fines estratégicos en la guerra es antigua como la propia guerra, pero las máscaras especiales y la tecnología de que disponen las fuerzas iraquíes dejan los efectos nefastos a los civiles bloqueados en medio del conflicto, en particular los niños, los más vulnerables. 

A medida que las fuerzas iraquíes se acercan a su gran bastión de Mosul, el EI prende fuego a los pozos de petróleo e incendia neumáticos dentro de la ciudad para desplegar un sistema defensivo, que incluye la quema de trincheras anegadas de petróleo, para obstruir la visión a los pilotos de los aviones de combate y a los sistemas de satélites del enemigo.

En el área de Al Tina, ubicada al sur de Mosul, también se elevan densas columnas de humo blanco provenientes de una planta de azufre incendiada por los yihadistas, que el viento esparce por todas partes mezclándolas con el humo negro de los pozos de petróleo.

En medio de esta neblina, que limita la visión a sólo centenares de metros, algunos niños cubiertos con polvo apelmazado juegan junto a una carretera. 

"Esto nos oprime el pecho", comenta Tiba, una niña de 11 años de edad, ataviada con un vestido azul y un pañuelo rojo. Anas, un niño de 7 años, con el pelo castaño rizado, dijo que le dolía la garganta. 

Según un comunicado de la ONU, entre 600 y 800 personas han solicitado asistencia médica a causa de esta nube tóxica provocada por el incendio de la planta de azufre. 

La mayoría de éstas fueron tratadas en un centro de salud en la cercana Qayyarah, pero el médico jefe del lugar señaló que varias tuvieron que ser trasladadas a un hospital mejor equipado de los alrededores.

[[nid:588458;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2016/10/000_hg23r.jpg;full;{Esta es la penumbra que viven centenares de familias en Mosul, tras el espeso humo de los incendios provocados por el grupo yihadista Estado Islámico.Elpais.com.co / AFP}]]Refugiados, 'atrapados' en frontera con Siria

Lograron escapar de Mosul, bastión del grupo Estado Islámico, pero cientos de iraquíes que buscan refugiarse en la vecina Siria están ahora atrapados en la frontera bajo fuego de los yihadistas y sus enemigos. 

De repente, aparece una moto. Por miedo de que sea un kamikaze del grupo Estado Islámico EI o un yihadista que vino a explorar la zona, los combatientes kurdos que protegen la frontera siria abren el fuego. La moto aparece una segunda vez y, nuevamente recibida con tiros, se va. 

"Un obús cayó acá, y una familia iraquí está herida. Hay enfrentamientos día y noche. Acá vivimos en peligro constante", se lamenta un treintañero iraquí. Huyó de Mosul y de la ofensiva lanzada el 17 de octubre por el ejército iraquí con apoyo de una coalición internacional dirigida por Washington para retomar el control de la segunda ciudad de Irak, ocupada por yihadistas.

La espera es larga. Hace diez días que el grupo está bloqueado en la frontera siria, en los confines de territorios controlados por EI en Irak.

Los combatientes de las Fuerzas Democráticas Sirias FDS, una alianza arabo-kurda apoyada por Estados Unidos, montan guardia detrás de un muro bajo. Cada día, estallan escaramuzas.

"Acá estamos en el frente, siempre hay tiros", lanza otro iraquí, con la cara tapada por una bufanda negra. Él también prefiere el anonimato.

"Mi hijo está enfermo por el calor. ¿Por qué no nos ayudan y nos hacen entrar en el campamento?", pregunta.  

[[nid:588459;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2016/10/000_hg2k3.jpg;full;{El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Acnur, afirmó haber recibido 912 iraquíes en estos últimos días en el campamento El Hol.Elpais.com.co / AFP}]]

Más de 200 kilómetros de tierra separan Mosul, último bastión yihadista en Irak, del campamento de refugiados El Hol, en Siria. Una distancia que los iraquíes recorren casi enteramente a pie, esquivando las minas enterradas por EI y los tiros de yihadistas que intentan impedir que los civiles se vayan.

Para explicar la espera impuesta a estos refugiados en la frontera, un miembro de FDS explica que se deben seguir "ciertos procedimientos de seguridad antes de enviarlos al campamento", por miedo de que se infiltren yihadistas que se hacen pasar por civiles. 

Moscú y París advirtieron sobre la huida de "terroristas" de Mosul hacia Siria. 

Mientras esperan llegar al campamento, las familias aguardan tendidas sobre mantas y bajo carpas de tela gastada para protegerse del sol. Hombres y mujeres que transportan en sus espaldas o sobre sus cabezas bolsos pesados y petates voluminosos en donde guardaron sus escasos bienes. 

Descalzos, y visiblemente mal nutridos, los niños prueban galletitas cuando no lloran, debilitados por las grandes diferencias de temperaturas del desierto.

[[nid:588462;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2016/10/000_hg2di.jpg;full;{Civiles de iraquí que fueron golpeados por la guerra en Mosul, esperan por algo de comida cerca a Qayyarah, Irak.Elpais.com.co / AFP}]]

Centenares de afectados 

Los médicos también confirmaron la muerte de dos civiles por inhalación de los gases fruto de la combustión del azufre. 

Este incendio fue apagado durante el fin de semana, pero los pozos de petróleo continúan ardiendo desde hace meses.

Los civiles que habitan en los límites de Mosul, en zonas que aún no han sido recuperadas por las fuerzas iraquíes, también se han visto afectados y ven muy limitadas sus posibilidades de recibir tratamiento.

Un médico del hospital Jomhuri de Mosul, contactado por la AFP, quien pidió el anonimato por razones de seguridad, dijo que un número cada vez mayor de habitantes sufre problemas respiratorios.

"Quienes más sufren son las personas asmáticas, sobre todo niños y ancianos", destacó el médico. 

"Hacemos todo lo que podemos, pero la escasez de medicamentos en el hospital es cada vez mayor", se lamenta.

Los mismos médicos dijeron a la AFP que los combatientes del EI sufren cada vez más heridos en sus filas en combates, por lo que acaparan parte de los suministros médicos, que son cada vez más escasos. 

Abu Thaer, un habitante de las afueras al este de Mosul, llegó con su hijo de cinco años al hospital Jomhuri la semana pasada. 

"Mi hijo tiene asma y está sufriendo mucho a causa del humo", dijo. "Los medicamentos aún disponibles son caros, así que lo traje aquí, donde está siendo tratado en la sala de oxígeno".

Se calcula que casi 1,2 millones de personas se encuentran aún en la ciudad, y según Abu Thaer muchas intentan alejarse de los incendios migrando hacia los barrios menos afectados.

[[nid:588464;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/563x/2016/10/000_hg2kd.jpg;full;{Familias iraquíes, que fueron desplazados por la guerra en Mosul, son llevados a un campo de desplazados cerca de Qayyarah, Irak. Elpais.com.co / AFP}]]

Impacto militar limitado 

Según expertos en salud y contaminación por armas químicas de la Cruz Roja Internacional, Cicr, las nubes de humo que cubren Mosul no son de las más tóxicas. 

"Cuanto más procesado es el petróleo, más tóxicos son los gases que contiene, pero al quemarlo el humo no es tan oscuro", explicó un miembro del Cicr a la AFP. 

"Los productos químicos tóxicos más letales y peligrosos son aquellos que casi no percibimos con los sentidos", prosiguió.

Cuando no hay máscaras disponibles, los civiles deben utilizar un pañuelo húmedo que cubra boca y nariz, contó.

En las imágenes satelitales, se ve un punteado de manchas negras cubriendo el campo de batalla de Mosul, pero los expertos afirman que la táctica yihadista tiene un impacto limitado, oscureciendo un poco la visión de los drones. 

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