Continúa oleada de protestas en España por apretón económico

Desde empleados públicos, hasta bomberos y policías cuestionan las medidas. Piden la renuncia de Rajoy.

Unos 400 españoles, entre policías, bomberos y representantes de otras entidades se concentraron ayer en la tarde frente al Congreso de los Diputados para protestar en contra de los recortes anunciados el miércoles por el presidente Mariano Rajoy, y pidieron su dimisión.También, junto a la sede del Partido Popular, cientos de funcionarios se concentraron para protestar por los recortes anunciados por el Gobierno y, en particular, por la supresión de la paga de Navidad de los empleados públicos, la subida del IVA y la reducción de las prestaciones por desempleo.Los concentrados arremetían contra Rajoy y contra los diputados, por lo que la policía se vio obligada a cortar el tráfico durante más de media hora.“Tenemos familia”, “El próximo desempleado, que sea un diputado” o “Derechos laborales y sociales”, fueron algunos de los lemas coreados por funcionarios y desempleados, de los cuales varios manifestaron a los medios de comunicación que los ciudadanos tienen que salir a la calle y “estar dispuestos para la lucha”.“Yo no digo que no se tengan que hacer ajustes, pero primero que los políticos se bajen el sueldo”, señaló una joven que aseguró que no había sido convocada por ninguna organización y se mostraba dispuesta a acudir cada día al Congreso para protestar.Tras manifestarse frente al Congreso, los protestantes marcharon hacia el cercano Paseo del Prado, donde cortaron el tráfico y, al grito de “Tu seguridad está en nuestras manos”, protagonizaron una manifestación pidiendo reiteradamente la renuncia de Mariano Rajoy.Gobierno confía en exportacionesMientras centenares de manifestantes rechazaron las nuevas medidas de austeridad, el Gobierno español se muestra positivo debido a un cambio de su modelo de crecimiento, que apostará por el sector exterior.El ministro de Economía, Luis de Guindos, aseguró que España devolverá completamente los créditos europeos de ayuda al sector financiero y que crecerá con las exportaciones. “Respondemos por la devolución. Estoy convencido de que no se producirá la más mínima pérdida para los acreedores”, dijo el funcionario y añadió que serán necesarios 62.000 millones de euros, y que los 100.000 millones que puso a disposición la UE son un “colchón de seguridad”.