Capturan a nueve presuntos narcotraficantes en Mexico

Los detenidos estaban en posesión de 24 armas largas, 2 tubos lanzagranadas y una mina antipersona, detalló el texto. La operación ocurrió en el municipio de Altamira (sur de Tamaulipas).

Efectivos de la Marina Armada mexicana detuvieron a nueve presuntos narcotraficantes que el pasado miércoles protagonizaron fuertes balaceras con autoridades en el estado de Tamaulipas. Un policía murió y dos más resultaron heridos, informó este jueves el Grupo de Coordinación Tamaulipas, que integra las fuerzas de seguridad desplegadas en esta región.

Los detenidos estaban en posesión de 24 armas largas, 2 tubos lanzagranadas y una mina antipersona, detalló el texto. La operación ocurrió en el municipio de Altamira.

En esa misma localidad, la mañana del miércoles militares y fuerzas estatales habían detenido a cuatro presuntos integrantes del cartel narcotraficante del Golfo, lo que desató los enfrentamientos.

Como ocurrió el viernes con la captura de un jefe del cártel del Golfo en la fronteriza Reynosa (noreste), sicarios bloquearon carreteras con vehículos incendiados y atacaron a las fuerzas de seguridad.

Fuentes del Gobierno federal informaron el miércoles que entre los cuatro primeros detenidos había un jefe local del cártel del Golfo pero todavía no ha emitido ninguna información oficial de la operación.

El Grupo de Coordinación Tamaulipas aseguró que la situación en Altamira, una ciudad de más de 200.000 habitantes, y las cercanas Tampico y Madero -donde también hubo balaceras el miércoles- estaba bajo control este jueves.

Numerosas localidades de Tamaulipas viven desde hace años con el latente peligro de que se desaten este tipo de enfrentamientos, ya sea entre grupos rivales del narcotráfico o entre éstos y fuerzas de seguridad.

El cártel del Golfo es la organización históricamente dominante en Tamaulipas, pero en los últimos años se ha venido debilitando por su enfrentamiento con sus antiguos aliados de Los Zetas y la detención de sus máximos líderes.

La estrategia militar contra el narcotráfico que lanzó el gobierno en 2006 provocó una violencia que ha dejado más de 80.000 muertos y 22.000 desaparecidos en México desde entonces.