955 personas siguen retenidas en una cárcel de Venezuela

Los reclusos y sus familias pretenden presionar a las autoridades para que se aceleren los procesos judiciales de los reos.

Unos 955 familiares de reclusos permanecen retenidos dentro de una cárcel a las afueras de Caracas para presionar a las autoridades para que aceleren los juicios de los internos, informó la ministra del área. La ministra de Servicios Penitenciarios, Iris Varela, confirmó la noche del martes que 955 familiares de los presos del Centro Penitenciario de Yare I y II, que ingresaron a la cárcel el fin de año durante las horas de visita, decidieron "autosecuestrarse" para presionar a las autoridades para que se aceleren los procesos judiciales de los reos. Entre los retenidos están 800 mujeres, 5 hombres y 150 niños y adolescentes. Varela dijo a la televisora estatal que el presidente Hugo Chávez dio instrucciones a las autoridades para que insistan en el diálogo y traten de resolver de forma pacífica la situación en la prisión, que se encuentra a unos 70 kilómetros al suroeste de Caracas. La ministra denunció que las organizaciones no gubernamentales locales que defienden los derechos humanos de los reclusos, a las que acusó de estar financiadas por la central de inteligencia estadounidense (CIA), intentan utilizar la situación de la cárcel para "desestabilizar el país", según reseñó la estatal Radio Nacional de Venezuela. En Venezuela existen 34 penales que tienen unos 47.000 reclusos, de acuerdo con registros oficiales. Los centros carcelarios fueron diseñados para albergar a cerca de 12.000 personas, pero la población penal supera casi cuatro veces la capacidad de las instalaciones, lo que ha generado graves problemas de hacinamiento y violencia. En las hacinadas prisiones venezolanas existen bandas que rivalizan por el control de los pabellones o el comercio de armas y drogas que guardias corruptos venden a los reclusos. La crisis carcelaria quedó al descubierto en junio de 2011 luego de que varios centenares de reclusos de la cárcel central de El Rodeo II realizaron por casi un mes un motín e impidieron con armas de fuego la toma de la instalación por parte de varios miles de militares. Hasta octubre del año pasado se habían reportado 487 muertes en los penales venezolanos, cifra que supera a la de 2010 cuando se registraron 476 asesinatos, de acuerdo con datos del Observatorio Venezolano de Prisiones. Entre 1999 y 2010 habrían muerto 4.506 reclusos y el número de heridos habría ascendido a 12.518.