"Vuelvo a creer en la justicia colombiana": José Crisanto Gómez

La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia revocó la condena de 33 años contra José Crisanto Gómez, quien fue el encargado de cuidar en la selva al hijo de Clara Rojas.

José Crisanto Gómez, el hombre que cuidó al hijo de Clara Rojas durante su cautiverio y a quien este lunes la Corte Suprema de Justicia le revocó la condena que le habían impuesto por 33 años, aseguró que ha vuelto a creer en la justicia colombiana. "Es una gran felicidad, una nueva oportunidad para mi vida. El Tribunal de Villavicencio me había condenado absurdamente a 33 años de cárcel y a una multa de $3 mil millones, que era una cadena perpetua para mí", dijo el hombre tras conocer la decisión de la Corte, en la que lo absuelve de los delitos de secuestro extorsivo agravado, fraude procesal, rebelión y falso testimonio.De esta manera, la Sala penal dejó en firme su decisión de primera instancia, en la que revocan la condena porque afirman que no se probó la pertenencia de José Crisanto Gómez a las Farc. "Nunca he trasgredido la ley ni cometido ningún delito. Lo que yo hice fue un acto humanitario y creo que esta no solo es una buena noticia para mí sino que es un mensaje para el país de que sí se puede hacer justicia". El hombre criticó que en su proceso en Villavicencio no hubo "capacidad investigativa que profundizara y que llegara a la realidad de las cosas" y agradeció a la Fundación Defensa de Inocentes por tomar su caso. Afirmó que actualmente su situación es difícil, pues ha recibido muchas amenazas y no "he podido acceder a ningún trabajo". Sin embargo, aclara que no quería salir de Colombia, a pesar de los problemas de seguridad, pues "quería solucionar esto y si me voy, hacerlo con la frente en alto".Por su parte, Elmer Montaña, abogado de José Crisanto, aseguró que la decisión de la Corte Suprema demuestra que "no había ningún elemento de prueba para afirmar que él fue integrante de las Farc, que participó en el secuestro del niño o que se enteró en algún momento de que el pequeño era hijo de Clara Rojas". Agregó que Gómez "siempre creyó que era el hijo de algún guerrillero y lo cuidó como su propio hijo en condiciones precarias, porque no tenía cómo atenderlo a él y a sus otros siete hijos". Montaña resaltó que este caso es especial para la Fundación Defensa de Inocentes, por la difícil situación que atraviesan José Crisanto Gómez y su familia. "Él está con sus siete hijos, expuesto a amenazas y trabaja en lo que puede, pero su situación es muy difícil. Ojalá el Estado no solo le brinde protección sino también la oportunidad de salir adelante". El caso EmmanuelEmmanuel, el hijo de Clara Rojas, nació durante el cautiverio de su madre el 16 de abril del 2004 y ocho meses después fue entregado enfermo a José Crisanto Gómez, en su vivienda en El Retorno, Guaviare. Gómez Tapiero llegó con el menor hasta San José del Guaviare y se hospedó en un hostal. Allí las empleadas, al ver el mal estado del menor, lo denunciaron ante el Instituto Colombiano del Bienestar Familiar, Icbf, entidad que junto con la Policía llegó a las residencias y se lo quitaron para llevarlo al hospital. En el centro asistencial de San José del Guaviare el menor fue ingresado con malaria, leishmaniasis, desnutrición y un brazo fracturado, según los registros que reposan en el Icbf, entidad que lo recibió bajo de la identidad de Juan David Gómez Tapiero. Sin embargo, posteriormente a través de pruebas de ADN, la Fiscalía lo identificó como el hijo de Clara Rojas.