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Según analistas, Santos da mensaje a Farc de no estar debilitado

Para analistas, es evidente que al reforzar la estrategia militar, el Presidente advierte a la guerrilla que el Estado no está débil para luchar en su contra, si fracasan los diálogos.

11 de octubre de 2013 Por: Colprensa y Redacción de El País

Para analistas, es evidente que al reforzar la estrategia militar, el Presidente advierte a la guerrilla que el Estado no está débil para luchar en su contra, si fracasan los diálogos.

Pese a los esfuerzos del gobierno del presidente Juan Manuel Santos por firmar un acuerdo de paz con las Farc, en los mensajes de los últimos días han dejado claro una vez más al grupo guerrillero que también “sabe, y está preparado, para hacer la guerra”.En una de las más recientes intervenciones, el Mandatario dejó claro que el país debe reforzar la estrategia militar contra los subversivos. La idea es no dejarlos ganar terreno. De acuerdo con los analistas consultados sobre el tema, es evidente que el Mandatario le está advirtiendo a la guerrilla que el Estado no está debilitado para iniciar una lucha frontal en su contra en caso de que fracasen los diálogos en La Habana.De ahí que el Gobierno esté reforzando las Fuerzas Militares contra la subversión. El miércoles, el Presidente lanzó el plan de guerra Espada de Honor II, en el que se crearán dos nuevas fuerzas de tarea conjunta, dos nuevos batallones de Fuerzas Especiales y se entregarán a 15.000 nuevos policías. Durante su discurso Santos pidió que el Ejército persiga a “los alias Carlos Lozada, ‘Romaña’, ‘El Paisa’ y ‘Joaquín Gómez’, todos comandantes de los bloques Sur y Oriental de las Farc. Este enérgico discurso se dio después de una consulta que el Mandatario hizo con el Partido de la U donde se contemplaron tres escenarios frente al proceso de paz. El primero, levantarse de la mesa; el segundo, suspender los diálogos mientras dure el proceso electoral y el tercero, seguir dialogando. Según el Jefe de Estado, la mayoría de los legisladores estuvieron de acuerdo con continuar el proceso “pero eso depende de la voluntad para llegar a acuerdos sobre los puntos en discusión”. Con esos antecedentes, el Presidente le hizo un llamado a los negociadores para que evacuen pronto un segundo punto del diálogo, como ya lo hicieron con el desarrollo agrario integral, “entre más tiempo pasa, menos cree la gente en el proceso de paz (…) por eso pido que antes del 18 de noviembre, fecha en la que se cumple un año del proceso, se llegue a un nuevo acuerdo”. En este momento la guerrilla y el Gobierno están discutiendo el punto de participación política que permitiría, eventualmente, que la guerrilla cambie “las balas por los votos”. Para Armando Estrada Villa, las declaraciones Santos están enmarcadas en el cumplimiento de las ‘reglas de juego’ en las cuales se realiza la negociación, “el Presidente tiene la responsabilidad de proteger a los colombianos y por eso pide que se persiga a los delincuentes. Así como las Farc destruyen y atentan contra el Estado, El Ejército tiene que tratar de defender a los colombianos y de atacar la guerrilla”.El académico aseguró que si se llega a un acuerdo en el segundo punto éste debe ser sustancioso porque en “el primer documento presentado por la guerrilla y el Gobierno es puramente contencioso y no resuelve a profundidad los problemas del campo en Colombia”.Para el exprocurador Jaime Bernal Cuéllar el Ejército debe responder, como es su deber, a la actividad de la guerrilla que últimamente se ha dedicado a enfrentarse contra el Ejército y atentar contra la sociedad, “después de un año de haber iniciado el proceso deben darse algunas conclusiones sobre los puntos, porque además el país ya se acerca a una campaña electoral lo que podría complicar aún más las cosas”, dijo el exprocurador. Según Bernal, es preocupante que el proceso de diálogo se politice y algunos candidatos lo comiencen a usar para la “politiquería en el país”. Por último, el exasesor de paz Lázaro Viveros sostuvo que las partes en negociación siempre han jugado con dos cartas, la de la ofensiva militar y la de los diálogos, “en el caso del Gobierno luego de un año de conversaciones y acercándose la época electoral es claro que el Presidente necesita hechos contundentes para salir bien librado del proceso. Pero, el tema no es fácil de discutir y no se puede pedir mucha celeridad”. Para Viveros, el proceso de paz puede terminar en más acciones violentas porque el Gobierno quiere mostrarse fuerte y la guerrilla busca demostrar que aún puede aterrorizar al país, “por eso el Gobierno ha incrementado el pie de fuerza y la guerrilla su estrategia militar. No me extrañaría que en estos días se diera la captura o la baja, de alguno de los cabecillas de los bloques Oriental y Sur”. El analista concluye diciendo que ambos bandos se están mostrando los dientes para que la contraparte acceda a firmar lo que a cada uno le conviene. A todo esto se suma que el Mandatario le dijo ayer a la guerrilla que ésta puede ser la última oportunidad que Colombia le dé a un proceso de paz. (Ver recuadro)

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