Robo de celulares en Cali, un flagelo que aún no se queda 'fuera de servicio'

Natalia y Andrea Fabiana no se conocen pero comparten algo en común: hacen parte de las 18 personas que a diario se acercan a denunciar por haber sido víctimas del robo de teléfonos celulares en la ciudad de Cali.

En el primer caso, la estudiante universitaria llevaba el teléfono oculto en la bragueta del pantalón mientras caminaba por el barrio La Flora, pero el audífono la delató. Bastó con que el hombre se bajara de la motocicleta frente a ella y sin que le mostrara un arma, voluntariamente le entregó el que había sido su regalo de grado.

Una semana después Andrea Fabiana, esposa del exfutbolista Alexis ‘El Pulpo’ Viera, fue abordada cerca de su residencia por dos hombres que le pusieron una pistola en la cabeza y la despojaron del teléfono celular y de sus otras pertenencias.

Cifras que reposan en la Policía Metropolitana aseguran que, entre el 1 de enero y el 9 de abril del 2017, en Cali se denunció en la ciudad el robo de 1600 celulares, cuando en el mismo periodo del 2016 fueron 1279 los casos. Es decir, hay un aumento del 25%.

52.875
celulares fueron robados en Colombia durante el 2016. Es decir, en el país se roban 145 cada día.

3837
denuncias por robo de celulares se interpusieron en Cali durante el años 2015.

142
personas fueron detenidas en Cali en el primer trimestre de este año por el delito de hurto de celulares.

Si bien el general Hugo Casas, jefe de la Policía Metropolitana de Cali, escribió recientemente que el nuevo Código de Policía contempla en cada uno de sus artículos una gran oportunidad para frenar delitos como el robo de celulares, este articulado no ha tenido efectos prácticos en la disminución de este delito.

Al contrario, entre más esfuerzos realizan las autoridades locales y nacionales para frenar este delito, el efecto parece inverso. Las cifras de casos denunciados revelan que hace un año 15 caleños eran despojados a diario de sus teléfono celulares mientras hoy son 18 las personas que cada día deben enfrentar esta situación.

En los últimos meses se ha logrado desmantelar dos bandas en Cali dedicadas al hurto de celulares, entre otros delitos. La última fue la banda de ‘Los Gokú’.

Peor aún, las autoridades son conscientes de que en Cali existe un subregistro amplio frente porque la gente no denuncia y consideran que la cifra real de robos por día sería tres o cuatro veces más a la que se conoce. Si la proyección funciona, cada día en Cali se estarían robando entre 60 y 70 teléfonos celulares.

¿Por qué no han funcionado las estrategias? ¿De qué ha servido la legislación reciente para evitar el robo de teléfonos? ¿Qué hace falta para contener este delito?

Rodrigo Zamorano, secretario de Gestión del Riesgo de Cali y encargado de la oficina de Seguridad y Justicia, destacó el papel importante que ha venido cumpliendo la Policía Metropolitana y la Sijín en identificar y desarticular las bandas dedicadas al robo de celulares, pero insistió en que es un fenómeno en el que la ciudadanía debe poner de su parte para poder combatirlo.

“Desafortunadamente en el país y en Cali existe una subcultura de comprar celulares robados. Si la gente no tuviera a quién venderlos, no se los robarían; el único mercado que tendrían sería en Perú, en Ecuador o Panamá, pero la realidad es que el mayor porcentaje se está quedando en Colombia”, aseguró Zamorano.

Uno de los investigadores de este delito en la Sijín, quien habló bajo la reserva de su identidad, aseguró que ninguna ley y ninguna medida será efectiva contra el hurto de celulares mientras la gente no tome conciencia de la importancia de denunciar.

“El problema es que los caleños terminan incentivando más este delito y siendo cómplices involuntarios cuando no denuncian el robo de sus celulares. Eso facilita que los ladrones los puedan rehabilitar sin inconveniente”, aseguró el investigador.

Agregó que mientras la gente no denuncie, “las bandas dedicadas a este tipo de hurtos seguirán obteniendo grandes dividendos sin mayor esfuerzo porque un solo celular les puede representar $400.000 o $500.000 en ganancias. Mientras si la gente denuncia, se ven obligados a tener que salir a venderlos fuera del país”.

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Esto explica el por qué en Cali en los últimos meses se ha logrado una reducción importante en casi todos los delitos de alto impacto como homicidios, paseo millonario, robo de vehículos y robo a bancos, pero no se encuentra la fórmula para frenarle el paso al robo de celulares.
El analista Diego Luis Sánchez aseguró que una gran oportunidad fue la campaña que se hizo del registro de los códigos IMEI de los teléfonos celulares, pero de nada sirve tener el registro de 30 millones de teléfonos si a la hora de un robo la gente no lo denuncia.

149
teléfonos celulares fueron recuperados en Cali en los primeros tres meses del 2017 y 38 más fueron incautados por la Policía.
98 %
de los robos de celulares en Colombia se presentan en las 10 principales ciudades del país.

“Se supone que con este registro se puede desconectar un teléfono que ha sido robado, pero si no se reporta es como si el teléfono no hubiera sido robado. Ahora, es fundamental que las empresas de telefonía exijan la factura para registrar un teléfono porque de lo contrario los delincuentes les regraban un número IMEI y es como si nada pasara”, indicó el analista.

Mientras tanto, la gente en la calle continuará asumiendo el riesgo de salir con un teléfono celular y por todo el país continuarán circulando los ocho millones de teléfonos robados que no han sido denunciados. Incluso, varios de ellos ligados a agresiones físicas y la muerte de sus propietarios.

El Imei es una secuencia numérica única para cada celular que se fabrica y el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), en apoyo de la Policía, realizan campañas para bloquear los teléfonos que han sido robados.

Cuando un usuario adquiere un plan o cambia de equipo, el operador realiza el registro y eso le permite que el teléfono sea inutilizado en caso de hurto.

Según la Gsma, una organización internacional que agrupa a más de 800 operadores móviles, Colombia es el después de Brasil y Argentina, donde más roban teléfonos celulares.