ONU preocupada por asesinato de defensores de derechos en Colombia

La Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU expresó su preocupación por los asesinatos de los defensores de derechos humanos Ermes Enrique Vidal, de 60 años y Gustavo Adolfo Pizo, de 31 años, en los últimos días.

La Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos expresó este miércoles su preocupación por los asesinatos de un líder de una organización preocupada de víctimas del conflicto interno y de un campesino, hechos ocurridos en la última semana. La ONU "reitera su preocupación porque en las zonas rurales del país, los activistas y defensores de derechos humanos están mayormente desprotegidos", dijo la Oficina de la Alta Comisionada en Colombia en un comunicado. La primera víctima fue identificada como Ermes Enrique Vidal, de 60 años, quien fue dado por desaparecido el 21 de marzo en una zona rural de Tierralta, en el departamento de Córdoba y a unos 560 kilómetros al noroeste de Bogotá, de acuerdo con la Oficina. El cadáver de Vidal, quien residía en una zona rural de Tierralta, fue encontrado flotando en aguas del río Sinú cerca a Tierralta el sábado pasado con dos tiros, uno en el pecho y otro en la cabeza, dijo en diálogo telefónico el teniente coronel Juan Carlos León, comandante operativo de la policía en Córdoba. El oficial dijo que Vidal, identificado por la ONU como el representante legal de una asociación de población desplazada, ni había reportado amenazas ni aparece en los registros de reclamantes de tierras. La segunda víctima fue Gustavo Adolfo Pizo, de 31 años, asesinado de una cuchillada en el estómago el 25 de marzo en Totoró, departamento de Cauca.Pizo era el presidente de la Asociación de Trabajadores Campesinos de Totoró, pertenecía al izquierdista movimiento Marcha Patriótica y "dirigía además el tema de reservas campesinas en la zona oriental de Cauca" , agregó la ONU en su comunicado. El coronel Ricardo Alarcón, comandante de la policía en Cauca, indicó telefónicamente que la muerte de Pizo se produjo tras una riña callejera en Totoró y fue herido con un arma cortopunzante en el abdomen por parte de un desconocido. Según la no gubernamental colombiana 'Somos Defensores', en el 2012 fueron asesinados en el país 69 activistas y líderes rurales. En todo 2011, según Somos Defensores, los asesinatos fueron 49.