Investigan homicidio de líder de víctimas en el Chocó

María Ofelia Mosquera, funcionaria de la OIM, fue hallada con varios disparos en su cabeza. Conozca las hipótesis que manejan las autoridades.

Una líder de víctimas del conflicto armado, que además trabajaba para la Organización Internacional de Migraciones (OIM), fue asesinada en el departamento del Chocó, informó ayer la Fiscalía.  Ofelia Mosquera, quien “laboraba en la OIM, además de trabajar en la implementación de la Ley de Víctimas”, fue encontrada muerta en la madrugada del sábado en el turístico municipio de Acandí, Chocó, “con dos impactos de bala en la cabeza”, dijo la Fiscalía en un comunicado. María Ofelia Mosquera, de 37 años y abogada de profesión, era el enlace en la zona del Programa de Fortalecimiento Institucional para las Víctimas de la OIM, y por tal motivo trabajaba en favor de los ciudadanos afectados por el conflicto armado, el despojo de tierras y en especial por los inmigrantes, tres problemáticas que abundan en el área. Fuentes judiciales indicaron que la jurista, quien residía en el municipio de Apartadó, viajó a una finca en el poblado San Francisco, en Acandí (Chocó), con motivo de las festividades navideñas.   La Fiscalía anunció la apertura de una investigación para esclarecer el crimen, que se suma a las decenas de homicidios, amenazas y atentados contra líderes sociales en 2015 en el país.  El cuerpo de Mosquera apareció “después de haber atendido a turistas que ocuparon sus cabañas los días 24 y 25 de diciembre pasados” en zona rural de Acandí, aunque la Fiscalía no precisó si el crimen está relacionado con su labor.  Ese municipio hace parte de la  región de Urabá, que comprende los departamentos de Antioquia, Chocó y Córdoba, zona en la que  actúa la banda criminal de origen paramilitar Clan Úsuga, así como el   Ejército de Liberación Nacional (ELN). Sin amenazas conocidas  La OIM es una agencia intergubernamental creada en 1951, se articula con la ONU y su propósito es “promover una migración ordenada a nivel territorial, nacional, regional e internacional, con enfoque de desarrollo sostenible”.  Voceros de esa entidad en Bogotá comentaron que estaban “terriblemente apesadumbrados por esta dolorosa noticia”.  Indicaron que un día después del homicidio, viajó a Apartadó Camilo Leguízamo, el jefe del Programa de Fortalecimiento Institucional para las Víctimas, quien acompaña a los familiares de María Ofelia y está pendiente de lo que informen las autoridades al respecto.  Se espera un pronunciamiento más extenso por parte de la OIM una vez este funcionario entregue su informe de la visita.    Ciro Abadía, presidente de la Asociación de Víctimas del Municipio de Apartadó (Asovima), explicó que ella nunca había hablado de amenazas en su contra o que tuviera algún problema grave. “Era una persona que valía mucho la pena, hacía un acompañamiento constante a las mesas de víctimas y le prestaba interés a las comunidades que están sumidas en el dolor”, narró Abadía, y lamentó más aún la pérdida porque el proceso de paz con la guerrilla “ya va muy avanzado y ella no podrá ver los beneficios que vendrán”.  Aunque los móviles del asesinato se desconocen, el caso fue asignado a la Dirección de Fiscalías contra el Crimen Organizado, pues ocurrió en una zona con presencia de bandas criminales, las cuales tienen una alta incidencia en la migración clandestina de personas que atraviesan a Urabá por tierra y mar, rumbo a Estados Unidos.