Hallan muerto en Bogotá a Adrián Hernández, expresidente de Comcel

El empresario mexicano fue uno de los ejecutivos encargados de la expansión de la empresa de telecomunicaciones Comcel ahora llamada Claro. Su cuerpo fue hallado en el norte de Bogotá.

El empresario mexicano Adrián Hernández, quien hace poco más de un mes señaló que se encontraba en bancarrota, apareció muerto este jueves en la noche en una casa del norte de Bogotá. 

El general Humberto Guatibonza, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, afirmó que el cuerpo de Hernández fue encontrado cerca de las 10:20 de la noche del jueves en el Barrio San Nicolás en Bogotá. 

El cadáver fue llevado a Medicina Legal para establecer las razones del fallecimiento del empresario mexicano. Se presume que sería por causas naturales.

El empresario Hernández era contador de profesión, empezó en la empresa Telmex en México y luego llegó a ser el presidente en Colombia de la empresa Comcel.

Hace apenas dos semanas la Revista Semana reveló un informe que tituló 'El viaje al infierno de Adrián Hernández', en el que relató la historia del empresario mexicano que pasó de vivir entre lujos a habitar en una casa de paso y hasta pedir dinero para conseguir comida. Hernández nació en Chihuahua, México, en el seno de una familia humilde, vendiendo paletas y realizando actividades de albañil. Sus primeros pasos en las telecomunicaciones los dio en Telcel, cuando Carlos Slim, el magnate mexicano, también comenzaba en el negocio. Fue en la pequeña Telcel, en ese entonces, cuando Adrián aprovechó una situación en la que ninguno de sus jefes pudo atender una reunión con ejecutivos de alto nivel. Él se hizo cargo y expresó sus opiniones sin titubear. Esto llamó la atención de Slim, quien lo envió a Guatemala a atender las operaciones de América Móvil, en donde obtuvo muy buenos resultados. Por eso, Slim lo trajo a Colombia a que se hiciera cargo de Comcel, después de ser adquirida por América Móvil y empresa en la que duró siete años. En 2009, su ascenso exitoso acabaría, después de que lo notificaran de su despido tras un escándalo de negocios que afectaba la compañía. Adrián se encontró con el dilema de pelear contra 'Goliat' o dar un paso al costado y aceptar la liquidación, a la que finalmente accedió. Viajó alrededor del mundo junto a su exesposa para solventar el dolor que significó la salida de Comcel. En uno de sus viajes notó un temblor en sus manos y una de sus piernas. Comenzó a padecer Párkinson, que lo postró durante un año y medio, y lo hizo que perdiera su dinero por los tratamientos; su esposa y sus hijos lo abandonaron. Después llegó para Hernández, de 54 años, una oportunidad de levantarse y salir adelante. Conoció a una mujer que le ayudaba a superar sus dolencias, consiguió un trabajo que le significaba unos pesos y además unas acciones que había adquirido con la liquidación de Comcel ya estaban disponibles. No obstante, esa recuperación se vio truncada en la noche de este jueves. La historia de Adrián Hernández tuvo un triste final, su salud estaba deteriorada y se habría agravado en las últimas horas.