Desmantelan un ‘mega’ laboratorio de cocaína en Tuluá

En el ‘cristalizadero’, ubicado en la vereda Las Garzas, se podían producir hasta dos toneladas semanales del alcaloide. El comandante de la Tercera Brigada del Ejército dijo que la estructura pertenecía a las Farc.

Un cristalizadero con capacidad para producir dos toneladas semanales de clorhidrato de cocaína, fue desmantelado en cercanías a Tuluá el lunes pasado por tropas del Batallón de Artillería No.3 adscritas a la Tercera Brigada del Ejército.Se trataría de uno de los mayores laboratorios de producción de este alcaloide, según el Ejército, al servicio de la columna Alirio Torres de las Farc.La operación se llevó a cabo en la vereda Las Garzas, en Tuluá (Valle), gracias a la información de varios pobladores y al trabajo de inteligencia del Ejército y la Policía Judicial, que tuvieron que soportar varios días de hostigamientos en la zona. El comandante de la Tercera Brigada, general Ricardo Jiménez Mejía, explicó que “es un duro golpe a las finanzas de las Farc, ya que los recursos que obtenían del cristalizadero era para financiar todo el accionar delictivo de este grupo en esta zona del departamento del Valle”.Al momento del operativo del Ejército dos personas fueron capturadas, las cuales “intentaron sobornar a los uniformados con seis millones de pesos para no realizar el desmantelamiento”, aseguró Jiménez.Los capturados fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para la definición de su situación jurídica. El Ejértico no aclaró si se trataba de guerrilleros o pobladores que trabajan en el lugar influenciados por las Farc. El laboratorio tenía 110 metros de largo por 30 de ancho, estaba ubicado en un cañón y tenía una vía con capacidad para el ingreso de un vehículo. En el cristalizadero se encontraron cinco estructuras: en las tres primeras fueron hallados insumos para el procesamiento del alcaloide, como seis hornos microondas, una prensa, una estructura de secado, 2.280 galones de combustible, siete tanques de almacenamiento de 1.000 litros, siete bultos de sulfato de amonio, doce bultos de soda cáustica, una pipeta de gas, seis lámparas, cuatro timbos de cinco galones con ácido sulfúrico, 1.000 metros de papel secante, material sólido y líquidos, entre otros.Las otras dos estructuras alojaban a doce personas aproximadamente con todas las comodidades. Tenían seis camarotes, una cocina para preparación de alimentos, doce colchones, un comedor, una batería sanitaria, un tanque para el almacenamiento de agua y un motor.En julio pasado, el Ejercitó desmanteló otro cristalizadero que estaba rodeado por varios campos minados en el corregimiento Mateguadua, también en Tuluá.En días pasados, el director nacional de la Policía Antinarcóticos, general Luis Alberto Pérez Alvarán, le explicó a El País que en el Valle, Cauca y Nariño, especialmente en la costa Pacífica, afectada no sólo por los cultivos ilícitos sino con la comercialización de cocaína hacia el exterior, están siendo objeto de trabajo por parte del Gobierno y las Fuerzas Militares.“Le estamos apuntando a que cada vez haya menos cultivos ilícitos y laboratorios para así quitarle fortaleza al narcotráfico. Toda Colombia tiene que ser inviable para esta actividad”, afirmó el general Pérez. Sobre el lugarCerca al laboratorio se encuentra una quebrada, que era usada como basurero y vertimiento de desechos químicos, afectando a la población civil que se surtía de sus aguas para la preparación de sus alimentos y para su consumo humano, lo que se traduce en una clara violación a los Derechos Humanos y en un atentado al medio ambiente, aseguró el Ejército.Según varias personas de la comunidad, en las noches se podía ver gente y luces trabajando en el laboratorio.El laboratorio llevaba al menos dos meses funcionando en esa parte del departamento, explicaron ayer las autoridades que realizaron el operativo.