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Desmantelan red de narcos que había infiltrado la Aerocivil en Barranquilla

En total las autoridades capturaron a diez personas, de las cuales dos eran controladores aéreos que trabajaban en el Aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla.

6 de febrero de 2013 Por: Elpaís.com.co | Colprensa

En total las autoridades capturaron a diez personas, de las cuales dos eran controladores aéreos que trabajaban en el Aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla.

La Policía desmanteló una red de narcotraficantes que delinquía desde el aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla y que se encargaba de distribuir estupefacientes a la costa Caribe y Estados Unidos. Entre los diez detenidos hay dos controladores aéreos vinculados como funcionarios a la Aeronáutica Civil. Los otros capturados en esta operación, resultado de una investigación de cuatro años entre la Dijín de la Policía y la Fiscalía, son vigilantes privados, un aeromecánico e inspectores de rampa. De acuerdo con el director de la Policía, general José Roberto León Riaño, la organización criminal no solo infiltró la Aeronáutica Civil, sino a empresas privadas que trabajan en la terminal aérea de la capital del Atlántico. “Eso les permitió el transporte de grandes cantidades de estupefacientes vía aérea hasta países centroamericanos, para posteriormente llevarlos a Estados Unidos”, explicó el general León Riaño. La investigación se originó a raíz de los hechos ocurridos el 8 de diciembre de 2008, cuando fue interceptada una aeronave en el aeropuerto Ernesto Cortissoz, cargada con 750 kilos de clorhidrato de cocaína y que tenía como destino final Guatemala. “Esa operación de las autoridades dejó al descubierto que los capturados delinquían para Jorge Isaac Sanmartín Giralo, alias El Viejo, y Marcos Alemán Saldaña, detenidos y extraditados a Estados Unidos en el año 2011, junto con otras 26 personas”, añadió el director de la Policía. Alemán Saldaña fue capturado por la Dijín el 6 de junio de 2011 y extraditado a Estados Unidos el 12 de agosto del año siguiente. Trabajó durante 19 años en la Aeronáutica Civil como operario en el aeropuerto Ernesto Cortissoz. En ese tiempo, realizó diferentes contactos que permitieron el tránsito libre de aeronaves cargadas con estupefacientes hacia países centroamericanos con destino final Estados Unidos. La organización criminal utilizaba hangares ubicados en el interior del aeropuerto, a donde, aparentemente, arribaban aeronaves para que les hicieran mantenimiento preventivo para su despegue. Pero, en realidad, a las naves la organización delictiva les realizaba adaptaciones clandestinas que les permitían el reabastecimiento de los tanques de combustible en vuelo para obtener mayor autonomía y alcance. También les cambiaban las matrículas y generaban planes de vuelo ficticios de manera sistemática, con el fin de evadir los controles ejercidos por las autoridades.

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