Capturan a cuatro personas por 'cambiazos' de tarjetas en cajeros automáticos de Cali

Cuatro personas fueron detenidas señaladas de hacer 'cambiazos' de tarjetas débito en cajeros automáticos de centros comerciales y supermercados en Cali.

La Sijín de la Policía le siguió el rastro por un año a los delincuentes tras asociar 34 denuncias. Las ganancias mensuales de la banda por este delito llegaban a $500 millones.

Los operativos se cumplieron en Bogotá, Ibagué y Pitalito, ciudades donde actualmente estaban delinquiendo los detenidos luego de salir de la capital del Valle a finales de enero.

Los capturados son alias Candado, jefe de la organización; alias 'Flaco Wilfor', segundo al mando de la banda; un hombre de 47 años y otra persona de 27 años.

Según investigaciones de la Sijín, la banda es oriunda de Ibagué, Tolima, y delinquían en cajeros automáticos que no cuentan con cubículo de seguridad, abordando a sus víctimas, principalmente personas de la tercera edad, ofreciendo ayuda para realizar las transacciones.

"Sin que la víctima se percatara, le cambiaban la tarjeta al cliente por una similar mientras memorizaban la contraseña para luego hacer retiros de dinero", cita un comunicado de la Policía.

En la capital del Valle la organización delinquió entre 2013 y 2016 en sectores como La Flora, Limonar y El Lido.

En Ibagué, Bogotá, Pereira y Armenia las autoridades mantienen abiertas otras investigaciones en contra de la banda por los 'cambiazos' de tarjetas en cajeros automáticos.

Alias 'Candado', de 39 años, y 'Flaco Wilfor', de 42 años, fueron detenidas cuando pretendían ingresar a un hotel en el norte de la capital del país. Los otros dos investigados fueron capturados en Ibagué y Pitalito.

Los sindicados fueron dejados a disposición de Fiscalía 178 seccional de la Unidad de Estructura de Apoyo por los delitos de concierto para delinquir; violación de datos personales; hurto a través de medios informáticos y transferencias no consentidas de activos.

Tres de los detenidos fueron cobijados con medida de aseguramiento en un centro carcelario de Cali, mientras otro más debe cumplir medida de casa por cárcel.

En este último, el juez consideró que el detenido debía cumplir la medida en su residencia debido a que no tenía antecedentes penales, aceptó los cargos y se comprometió a indemnizar a las víctimas.