Cada día del 2012, tres casas fueron saqueadas por apartamenteros en Cali

Los robos a casa en Cali tuvieron una tendencia violenta que antes no se había presentado con tanta regularidad: hombres escalando balcones, irrumpiendo con armas de y encerrando a las personas son la tendencia. Tres bandas de apartamenteros han sido desmanteladas en lo corrido del 2012.

Si los robos pudieran promediarse, cada día del 2012 tres casas fueron saqueadas en Cali. Nada nuevo, podrá decir alguien, pero el asunto es que ese delito había disminuido en la ciudad. La novedad, además, está en que muchos de esos robos fueron realizados en los mismos sectores. Es decir, en varias ocasiones, los apartamenteros repitieron la zona donde ya habían operado para dar nuevos golpes. En barrios del sur donde el flagelo ya es bien conocido (y padecido) por sus habitantes, la situación se repitió con ciertas similitudes a los años anteriores: el descuido de alguien barriendo el antejardín, una puerta mal cerrada, el engaño a una empleada del servicio...Pero en sectores residenciales como Santa Mónica, algunos robos tuvieron una tendencia violenta que antes no se había presentado con tanta regularidad: hombres escalando balcones, irrumpiendo con armas de fuego, encerrando gente en baños mientras cargaban su botín. Aunque suene a exageración, no es así: Hace exactamente cuatro meses, a las ocho y treinta de la noche, dos hombres escalaron el balcón de Eduardo Rivera, un hombre de 42 años que a esa hora descansaba en la casa que comparte con sus padres en Santa Mónica. Cuando vio la sombra de uno de ellos corrió hacia el intruso, pero un revólver apuntándole al pecho lo detuvo en seco. Preguntaron quién más estaba en la casa. Los encerraron a todos en un baño. En veinte minutos se llevaron diez millones en televisores, portátiles, joyas, celulares.Ese fue el quinto robo hecho en ese barrio durante el 2012. En total fueron siete. El caso de Santa Mónica, sin embargo, es apenas un reflejo de lo que ocurre en otras partes de la ciudad.En el sur, en un área comprendida por barrios como El Caney, Valle del Líli, El Ingenio y El Refugio, se registraron 35 denuncias de robos a residencias. En Cali, en el 2010 robaron 1079 casas; en el 2011 fueron 1004; el año pasado, 1085.Los registros del Observatorio Social demuestran que el 49% de esos hurtos fue ejecutado rompiendo las cerraduras. Otro 21% ocurrió mientras el dueño de casa parqueaba su carro. El porcentaje restante se dio a través de engaños e intimidación con arma de fuego.De esa manera, explica la Policía, operaban las tres bandas de apartamenteros que durante el 2012 fueron desmanteladas. En todo el año, 160 personas fueron detenidas.Beatriz, una ingeniera agrónoma que vive en el sur de Cali, fue víctima de una de las bandas que se aprovechaba de la gente cuando parqueaba su carro. A ella la robaron en Champagnat: un hombre se acercó a preguntarle una dirección y mientras contestaba la encañonaron. Luego la hicieron entrar a la casa y allí, después de intimidar a las cinco personas que estaban dentro, los ladrones recogieron teléfonos, efectivo y varios elementos de hogar. Todo ocurrió a las nueve de la noche, una hora coincidente con las estadísticas: más del 50% de los hurtos a residencias ocurrieron por la noche. Objetivo policial del 2013En el panorama de los hurtos no todo es malo: de las 160 personas que fueron capturadas en el 2012, 136 detenciones fueron realizadas en flagrancia. Y eso significa un incremento del 27% respecto a las capturas del 2011, que fueron 107.Esos resultados, indica la Policía, son consecuencia, en gran parte, del Plan Cuadrantes, el Plan Motos y los Planes Candado que cada vez han venido ejecutando con mayor regularidad. De hecho, de acuerdo con el comandante de la Policía Metropolitana, Fabio Castañeda, conjurar ese delito es uno de los objetivos prioritarios de las autoridades para este año. Teniendo en cuenta números y comparativos, la promesa del Oficial parece ir por buen camino: en enero fueron robadas 84 residencias en Cali; y eso representa una diferencia de 46 casos menos en comparación al mismo mes del 2012. La reducción, en términos porcentuales, llega al 46%.Las autoridades buscan evitar más casos como uno que se puede ver en Youtube, donde se registra un intento de robo en Normandía. Allí es posible apreciar cómo a dos hombres y una mujer que intentan meterse a una casa, les disparan desde el interior. Aunque el hecho no dejó heridos ni muertos, pudo terminar en tragedia. Violencia empujando a la violencia. El intento de robo fue grabado a través de un sistema de seguridad que desde hace un par de años está siendo muy utilizado por la gente: cámaras que a través de internet pueden monitorearse desde cualquier parte a través de un teléfono inteligente. Así, los dueños de la casa de Normandía, se habrían dado cuenta de que estaban a punto de ser asaltados. El otro sistema que se ha venido popularizando es el de las alarmas conectadas a una empresa de seguridad privada. Para ello, es necesario pagar una mensualidad (además de los costos de instalación) que promedia los $60.000.Según Mónica Isabel Lerma, gerente comercial de una empresa de seguridad electrónica, desde abril del año pasado, la venta de sistemas de vigilancia se ha duplicado: “Sobre todo durante la Semana Santa y las temporadas de diciembre. Es un mercado que en esta ciudad ha crecido como una avalancha en los últimos meses”.“Una de las cosas que más nos sorprende -agregó- es que quienes más están comprando esto son las personas de los estratos dos, tres y cuatro”.Y puede que sí: de acuerdo con el Observatorio Social, las comunas en las que se presenta mayor número de hurtos a residencias con las 2, 17 y 19.Néstor Rivera, secretario de la junta de acción comunal de la comuna 2 lo dice casi con resignación: “Es como si nos tuvieran en el foco, roban aquí, allá, en todas partes. Nosotros estamos haciendo un trabajo para la convivencia y la seguridad ciudadana con el que buscamos concientizar a la gente de la necesidad de denunciar, pero también necesitamos ayuda”.