El pais
SUSCRÍBETE
Tainy estuvo en la producción de los álbumes 'Vibras', 'Oasis' y 'X 100 pre'. | Foto: Tomadas del Instagram de Tainy

CANTANTE

Tainy, una charla con el genio detrás de los éxitos mundiales del reguetón

A los 16 años Tainy producía los éxitos de Wisin y Yandel, ahora los de Bad Bunny y J Balvin. Charla con el puertorriqueño detrás del éxito de 'Safaera'.

28 de abril de 2020 Por:  Jhon Montenegro, reportero de El País

A los 16 años el productor de reguetón Tainy andaba por las calles de Puerto Rico en un Mercedes y realizaba las canciones de Wisin y Yandel. Nada mal para una persona que ni siquiera había cumplido la mayoría de edad.

Más de una década después, ahora entrado en los treinta, no solo solo se dedica a producir éxitos mundiales del reguetón, sino que busca abrirse un espacio como compositor con el álbum ‘The Kids That Grew Up On Reggaeton’, lanzado hace poco más de un mes y que tiene colaboraciones con artistas como Lauren Jauregui, Sean Paul, Lennox y Cazzu.

“Cada uno de los que estamos ahí crecimos escuchando el género. El proceso fue interesante, no fue forzado. Aprendí mucho”, señaló Tainy.

Para hablar de su importancia en el reguetón, no solo hay que mencionar canciones contemporáneas como ‘Adicto', que hizo con Anuel AA y Ozuna y que, según le confesó a El País, compuso Jhay Cortez ("eso tal vez no muchos saben”), sino también traer a colación clásicos del género como ‘El Teléfono’, ‘Pam Pam’, ‘Abusadora’ y ‘Déjale caer to’ el peso’.

Puede leer: Películas y series de televisión para celebrar el Día del Niño durante la cuerentena

Luny Tunes, otro legendario productor y uno de los responsables de darle la oportunidad a Tainy dentro de la industria, reconoció hace poco, en una transmisión en vivo por redes sociales,  que “cuando yo te vi trabajando en el estudio… pensé en llevarme a este chamaco y llevarlo conmigo de la mano porque sabía que iba a ser grande. Ahora es el productor más duro del género, haciendo súper palos. Me siento orgulloso”.

El mismo Anuel AA, en uno de los comentarios de dicha transmisión, dijo: “Sin ustedes nosotros no existiéramos”.

Y es que, para los seguidores de la música urbana es normal escuchar, al final de las canciones, los nombres de quienes colaboraron y produjeron los temas.  Tainy es uno de esos nombres detrás de los éxitos. La 'magia' de canciones como 'Callaíta', 'China', 'No es justo' o ‘I Like it’, la puso este puertorriqueño.

Tainy ganó el Latin Grammy con el álbum 'X 100pre' de Bad Bunny.

Marcos Efraín Masís Fernández, como lo conocen sus más cercanos, ha sido el culpable de que el beat de esos éxitos, que han hecho del reguetón un fenómeno global, nos hagan movernos, incluso, en medio de la cuarentena. Esto contó este exitoso productor en diálogo con El País:

Los que siguen el reguetón desde sus inicios sabe quien es Tainy, pero parece que ahora se les pondera mucho más a ustedes…

Es un proceso diferente. La mayoría de productores nos la pasamos en el estudio y yo creo que ahí es que nos quedamos, el que quiere saber, obviamente, busca los créditos (de la canción), pero no es algo que uno ve todo el tiempo. El enfoque siempre está en el artista. Sin embargo, siento que ahora tenemos una plataforma para poder darnos a conocer un poco más, que la gente conozca más de nosotros, lo que estamos haciendo, nuestros gustos y las cosas que queremos hacer como creativos que somos.

Desde temprana edad usted ya andaba metido en los estudios, ¿cómo influyó haber iniciado tan joven?

Ha sido un proceso increíble, una trayectoria súper cool. De verdad que siempre estaré agradecido de haber empezado a producir y entrar a la música a temprana edad. Eso me dio la oportunidad de aprender de los mejores. Cuando entré al estudio estaban trabajando Luny Tunes, Nely ‘El arma secreta’, Nesty ‘La mente maestra’. Al igual que ellos, todos los artistas: Wisin y Yandel, Daddy Yankee, Don Omar, Zion y Lennox, Alexis y Fido. Todo el mundo estaba en esos estudios. Poder ver cómo producían, componían y llevaban a cabo un tema es algo que me ayudó a estar donde estoy hoy en día. Estoy agradecido de haber tenido ese proceso.

Ha producido himnos y éxitos mundiales que ‘rompen’ la rumba. En su opinión, ¿qué debe tener sí o sí un buen reguetón?

Es una combinación de varias cosas... muchas veces los temas no son nada del otro mundo ni tienen mucho contenido, pero el beat te atrae tanto que hace que la canción se convierta en un éxito. El reguetón se caracteriza por tener un buen beat siempre. Es algo que tenemos en mente a la hora de crear para que la temática conecte con la generación que está viviendo ahora, con lo que se está hablando y con el estilo que se está cantando... creo que esa combinación de cosas hace que un buen reguetón llegue a las discotecas y que la gente pueda conectar.

¿Primero el beat y luego la letra?

Todos los casos son diferentes. Hay muchas maneras. Hay veces que yo trabajo instrumentales y se los presento al compositor o al artista y ellos se encargan de ponerle letra y melodía; hay otros que tienen un coro que les gusta pero no necesariamente tienen el beat para tener el tema completo y ahí es donde yo entro: a buscar qué se escucharía bien con lo que están cantando. Hay otras veces en las que decido hacer una sesión con el compositor y empezamos de cero a ir dándole forma poco a poco.

¿Cómo ha sido su experiencia junto a dos iconos como J Balvin y Bad Bunny?

Para mí ha sido una experiencia increíble poder trabajar con ellos dos porque somos más cercanos en la edad que tenemos y la generación que vivimos, porque yo entré a los 14 o 15 años y ya la mayoría de los artistas me llevaba como diez años y teníamos diferencia entre lo que escuchábamos y leíamos.

Podemos hablar de miles de cosas fuera de lo que es la música o hablarnos todos los días o escribirnos y tener esa amistad más allá del colegaje en la música. Son muy innovadores y creativos y a mí como productor me llena de emoción cada que nos metemos al estudio porque sé que lo que viene es algo que me va a fascinar… puedo tratar cosas que no he hecho antes y van a empujar y tratar de hacer que la música suba a otros niveles. Es un orgullo trabajar con ellos dos.

Hablemos de ‘Safaera’, uno de los temas mejor recibidos del álbum ‘YHLQMDLG’ de Bad Bunny, el cual tiene un sonido que nos remonta al perreo old school…

El tema de ‘Safaera’ fue un proceso bien diferente; fue algo que no había hecho antes. Los comienzos del género, en Puerto Rico, tenían ese tipo de beats. Es algo que nos trae a nuestra niñez en Puerto Rico. Fue súper cool ver que no solo allá ha conectado, sino que en el mundo entero. Sé que la gente quedó sorprendida con la forma en que se creó ese tema. Ahí se ve lo genio que es Benito (Bad Bunny) y cómo puede hacer cosas que no hemos escuchado antes y seguir innovando.

Ahora el reguetón es masivo y mundial...

Creo que nuestro género está evolucionando todavía. Es un proceso en el que llega a diferentes país del mundo y cada uno le da su estilo, su forma y su manera. Las plataformas ayudan a que muchas personas escuchen lo que estamos haciendo. Tenemos un ritmo tan contagioso... que no importa el idioma que tú hables, si tú escuchas reguetón es algo que seguro va a animar la fiesta.

¿Qué viene ahora?

Quisiera trabajar con artistas con los que nunca lo he hecho. Poder tener un proyecto más grande, creo que eso es lo que me espera a mí para este año. Tengo una lista de artistas con los que quiero trabajar… Rosalía, el único chance que tuvimos fue en el disco ‘Vibras’ de Balvin, soy fanático de lo que hace; alguien con quien quisiera trabajar es Julieta Venegas; Travis Scott es alguien que también me encanta. Hay muchos artistas a los que estamos tratando a ver cómo podemos llegar, bien sea en sus proyectos o colaborando con colegas míos… hay un sinnúmero de cosas que podemos hacer.

No nos podíamos ir sin aclarar la duda, Tainy, lo del Mercedes a los 16 años que se menciona en la canción 'Permitame' de Yandel y Tony Dize era verdad o un mito del reguetón...

Era la verdad, era la verdad… No lo podía guillar todavía, pero lo guillaba mi mamá y me llevaba a la escuela (risas).

AHORA EN Entretenimiento