¿Qué pasará con el imperio 'Playboy' tras la muerte de Hugh Hefner?, comienza la disputa por su herencia

¿Será que Hugh Hefner estará ahora en un mejor paraíso que el que tuvo en la tierra?, esa es la pregunta que muchos hombres se hacen desde el pasado miércoles cuando se conoció que el fundador de la revista Playboy había fallecido a los 91 años, después de una vida llena de lujos y muchas mujeres.

Es precisamente una de sus esposas la que ahora se encuentra en el ojo de huracán, pues se creía que a ella le tocaría parte de la herencia que dejó Hefner al morir. Sin embargo, los medios de comunicación de Estados Unidos afirman que la modelo Crystal Harris, viuda del millonario, se quedará afuera de la repartición de la fortuna del fundador de la exitosa revista.

Por lo menos así lo afirmó la revista US Magazine, que reveló detalles del acuerdo prenupcial que firmó la pareja antes de casarse. “Crystal Harris no se ha añadido al testamento preexistente del editor. La fortuna estimada de Hefner por $43 millones de dolares se promete a sus cuatro hijos, la escuela de cine de la Universidad del Sur de California y varias organizaciones benéficas”, publicó.

Hefner y Harris se casaron el 31 de diciembre de 2012 durante una ceremonia en la mansión de Playboy, en Los Ángeles. En aquel entonces, él tenía 86 años y ella 26, es decir, había una diferencia de 60 años. La canción ‘40 y 20’ de José José, les quedó en pañales.

Por ahora, Harris, quien fue portada de la revista en la edición de julio del 2011, no ha dado ningún tipo de declaración a los medios de comunicación y ha guardado total silencio.

Lo que sí dijo la expareja de Hefner en una ocasión mientras se encontraba peleada con él, fue: “Hugh duraba unos dos segundos en la cama”, y que ella no se sentía atraída por él. “Hef no se quita la ropa.
Nunca lo he visto desnudo. Hef no me excita. Lo siento”, confesó.

43
millones de dolares es la fortuna que dejó el fundador de la revista Playboy. Muchos creían que el magnate tenía más dinero ahorrado.

Pasarán los días para conocer a ciencia cierta qué pasará con la herencia del hombre que fue envidiado por muchos en todo el mundo, inclusive, aún estando muerto, pues al parecer será enterrado al lado de la tumba de Marilyn Monroe, situación que ha dividido a la opinión pública, ya que algunos lo interpretan como un gesto conmovedor y otros como una sórdida intrusión. "Pasar una eternidad junto a Marilyn es demasiado dulce", escribió en Twitter Vinny Chase, jugador de fútbol americano.

Shannon Moore, un importante luchador profesional escribió: “Hugh Hefner descansa para la eternidad junto a Marilyn Monroe. Nadie estará cerca de lo que este hombre era”.

Lo que no se sabe a ciencia cierta es si la propia Marilyn esté contenta con la presencia de Hefner, pues se dice que ella se sintió avergonzada después de la publicación de sus fotos en la primera edición de la revista PlayBoy.

La Mansión Playboy, escenario de legendarias fiestas, es también una marca ineludible de Hugh Hefner. Pero el hombre hace un año vendió el mítico inmueble con una condición: poder seguir viviendo allí hasta el fin de sus días. Ese día llegó el miércoles, cuando falleció en una de esas habitaciones. ¿Y entonces? ¿Qué pasará con la casa?

Ahora quién se hará cargo será el nuevo dueño, un excéntrico hombre de negocios de 33 años cuya fortuna fue estimada en 2.400 millones de dólares por la revista financiera Forbes.

La propiedad de dos hectáreas tiene 29 habitaciones, una sala de juegos, una sala de teatro, un depósito de vinos y la famosa piscina en forma de cueva donde las conejitas celebraron con todo tipo de celebridades. Además, tiene licencia para albergar un zoológico, algo inusual.

En junio del año pasado, la mansión se puso a la venta en 200 millones de dólares y tuvo un rápido comprador: un vecino de Hefner, el multimillonario Daren Metropoulos, quien ya le había comprado en 2009 la propiedad contigua a su mansión en 18 millones de dólares. Pero en el contrato figuraba una condición extraña, que la casa se vendía, pero con Hefner adentro.

Su nuevo dueño no tuvo inconvenientes. Metropoulos, un hombre de negocios de 33 años, hijo del magnate C. Dean Metropoulos, cuya fortuna fue estimada en 2.400 millones de dólares por la revista financiera Forbes, dejó al emperador del erotismo seguir viviendo entre sus paredes.

Por eso, ahora aquel mítico lugar, donde dicen que Elvis habría dormido con ocho Playmates a la vez o donde John Lennon quemó un Matisse al dejar tirado su cigarrillo, quedará en poder de Metropoulos.

¿La destruirá? No. ¿La mantendrá de la misma manera? Tampoco. ¿Qué planes tiene? Muchos. Cuentan que su deseo desde que la compró es unificarla con el lote que ya tenía en Holmby Hills (California) y crear un centro de atracciones para adultos.

El joven está decidido a disfrutar de la buena vida gracias a la fortuna que generó su padre, un griego que a los diez años emigró a Estados Unidos con su familia. El apellido cobró mucha fama al revivir varias golosinas, snacks y alimentos que regresaron a las góndolas de los supermercados, como Duncan Hines, Hungry-Man, Vlasic y Twinkies.

Solo con el pasar de los días se conocerá qué irá pasando con una mansión llena de historias.

Solo las conejitas más sexys lograron residir en la mansión Playboy, entre ellas están Holly Madison y Kendra Wilkinson, quienes revelaron los pasajes más oscuros de vivir a costas de Hugh Hefner.

Pese a todos los lujos que tenían las conejitas que vivían en la mansión, no todo era color de rosa. Holly confesó que conoció a Hefner cuando tenía 20 años y quiso solucionar su vida siendo una de sus novias, sin embargo, pensó que no tenía que acostarse con él.

Holly reveló que tuvo relaciones sexuales con Hefner para vivir en la mansión. Además, contó que cada vez que regresaban de una fiesta, todas las chicas debían usar pijamas de franela, fumar marihuana y hacer escenas de sexo lésbico, mientras que Hefner se masturbaba.

1. Educación religiosa
Hefner fue hijo de dos profesores de fuertes creencias religiosas. Describió su educación como “conservadora”. Su madre una vez dijo que estaba orgullosa de él, pero habría sido más feliz si hubiera sido un misionero.

2. Nació para triunfar
Hugh fue muy popular desde la escuela. Sus compañeros de clase le eligieron por votación como uno de los estudiantes con más opciones para tener éxito. En la escuela era un líder al que muchos seguían.

3. De redactor a editor
Antes de Playboy, Hefner trabajó como redactor para la revista Esquire. Sin embargo, lo dejó después de que rechazaran su petición de aumento de sueldo de 5 dólares. Algunos en ese tiempo decían que iba a fracasar.

4. Pidió plata prestada
En 1953, Hefner pidió prestado 8.000 dólares para producir el primer número de Playboy, a lo que añadió 1.000 dólares de su madre. Así creo la primer edición de la revista con un conjunto de fotografías desnudas de Marilyn Monroe.

5. No se iba a llamar Playboy

Playboy iba a ser llamado Stag Party (Fiesta del ciervo), pero Hefner cambió de idea en el último minuto. “¿Puedes imaginar una cadena de clubs con chicas que llevan cuernos?”, preguntó después.

6. Conexiones políticas

Hefner era primo lejano del expresidente estadounidense George W. Bush y del senador demócrata John Kerry. Estas conexiones políticas poco salían a la luz pública, pues no le agradaba mucho a Hefner.

7. Múltiples matrimonios

El magnate de la prensa erótica se casó tres veces, y tiene cuatro hijos de sus dos primeros matrimonios. En 2012, pasó por el altar por tercera vez con Crystal Harris, que había sido modelo destacada en la edición de Playboy.

8. Fan de los álbumes

Hefner tenía más de 18.000 álbumes de recortes que narraban cada detalle de décadas de su vida. Los álbumes incluían fotografías de todas las personas que habían visitado la mansión de Playboy y habían aparecido en su revista.

9. ¿Más de 2.000 mujeres?

Hefner decía que se había acostado con más de 2.000 mujeres. No obstante, insistía en que siempre fue fiel durante sus matrimonios, lo que “compensaba” cuando estaba soltero para tener varias relaciones sexuales al día.

10. Amante de los animales

La famosa mansión de Playboy tenía licencia de zoo y acogía una amplia variedad de animales exóticos que conviven con las modelos de Playboy. Su animal preferido eran los perros.