'Objetivo Bin Laden', retrato de la obsesión con el hombre más buscado del mundo

La película de Kathryn Bigelow le cuenta al mundo cómo el seguimiento de Bin Laden se convirtió en una obsesión para una mujer.

Desde Washington llega Maya a la sede de la CÍA en Pakistán, donde inicialmente asistirá al espeluznante interrogatorio de Hammar, ficha clave en la búsqueda de los autores intelectuales del magnicidio del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York. Se trata de la primera misión de Maya, quien espera ser tratada igual por sus compañeros hombres. Aquí, ella es simplemente la agente y está dispuesta a hacer lo que sea por lograr su objetivo. Además, considera que sobre sus hombros están las esperanzas de miles de familiares de víctimas del 09/11. Urge la venganza.El odio, ese mal que ancestralmente ha carcomido el espíritu de la humanidad, fundamentado en codicia, discriminación, cultura o religión, se expone de forma contundente en esta cinta testimonio de nuestra época. La crudeza de los métodos de ambos bandos, la violencia esgrimida como estandarte de la venganza, son actitudes inherentes a la humanidad, y a estas alturas no distinguen entre contendientes. Sin embargo, la película inserta voces en off en una pantalla negra de introducción, recordándonos disímiles hechos de angustiosa cercanía a la muerte, por culpa de los talibanes, en el escenario auditivo de las Torres Gemelas. “Así comenzó todo”, dice entonces el preámbulo, para justificar las horrendas escenas de tortura que veremos en el primer segmento de ‘Zero dark thirty’ (título en inglés)Una sólida recreación del proceso que llevó al ajusticiamiento de Osama Bin Laden, es el objetivo logrado por la directora Kathryn Bigelow con su aplaudido filme. De hecho, la producción también vivió el real proceso histórico, ya que la película inicialmente contaría la fallida captura del líder talibán. Luego, cuando el mundo supo que la CÍA había logrado asesinar a Laden, el guion tuvo que ser reescrito.Estamos entonces ante un documento periodístico fílmico (un documental en formato narrativo), que revela al mundo la importancia cobrada por Maya, el nombre con que se conoce a la agente que convirtió la ubicación de Bin Laden en una auténtica obsesión. Testimonios posteriores al estreno de la película, por ejemplo de compañeros de Maya en Pakistán, afirman que el personaje interpretado por Jessica Chastain es “demasiado fiel” a la realidad. Detalles como que ella lloró frente al cadáver del villano, son corroborados por muchos.En cambio, desde el Ejército estadounidense hasta la CÍA, se han producido fuertes cuestionamientos acerca de la actitud del grupo especial que cumple la misión, cuando llegan a la casa de Laden en helicópteros, haciendo bromas y riendo como si estuvieran de paseo.“Eso es falso”, dijo el soldado que disparó a Laden, en entrevista con la Revista Enquirer: “No había tiempo ni ganas de bromas, todos íbamos supremamente callados”.