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Marcelo Dos Santos se roba el show en la serie 'La Niña'

Tendrá stand up comedy y hará el viaje de su vida en moto.

13 de mayo de 2016 Por: Sergio villamizar | Colprensa

Tendrá stand up comedy y hará el viaje de su vida en moto.

A medio de las grabaciones de la serie ‘La Niña’, y preparando una gira nacional con un ‘stand up comedy’, el actor argentino Marcelo Dos Santos se la pasa ‘cacharriándole’ a una motocicleta de alto cilindraje. La razón es una sola, cumplir uno de esos sueños que suelen ser pospuestos durante años, por diferentes motivos, pero este actor porteño de 55 años de edad ya le puso fecha y se encuentra preparando la motocicleta con la cual espera viajar, ida y vuelta, hasta la misma Patagonia. Son cerca de 20.000 kilómetros, vía carretera, los que distancian a Bogotá con Usuahia, la ciudad más austral del mundo, pero Dos Santos está seguro que serán más, pues espera tener el tiempo necesario para desviarse y dejar perderse por los caminos de Ecuador, Bolivia y Perú. Todo esto mientras que los televidentes lo ven en ‘La Niña’, la serie más vista en la televisión colombiana en la actualidad, donde interpreta a Alfonso Montealegre, un médico patólogo y decano de la facultad de medicina de la universidad de San Pablo, en la cual ha sido profesor desde hace 18 años.  ¿Cómo ha visto la reacción de los televidentes con los primeros capítulos de esta serie? Estamos muy contentos porque creo que está tocando muchas fibras de manera neutral, que es lo que importa. Es la versión y la realidad de las víctimas, sin importar de dónde vengan ellas, y eso es lo más interesante en este momento. ¿Temas que ante la televisión no se atrevía a tocar? Es un derecho. Lo ha dicho Juana Uribe, la televisión tiene sus noticieros que intenta contar las historias tal cómo fueron, mientras que la ficción profundiza más y la muestra como podría ser. Esto es clave para quienes no estamos ni en el lado A, ni en el lado B de todo este conflicto. La serie ayuda para que nos identifiquemos con todas las víctimas, sin importar de qué lado vengan. Pero en especial, el punto central de la historia, son los cientos de niños  que a pesar de su voluntad vieron cambiada su vida para siempre. ¿Quién es  su personaje? Es Alfonso Montealegre, quien es un eminente patólogo forense, decano de la facultad de medicina, donde luego del ingreso de la protagonista de la serie a la facultad, él debe empezar el replanteamiento de muchas cosas y muchos de sus conceptos y avanzar.  ¿Es difícil la relación con la protagonista? Ella le cambiará la cabeza, con cosas que sucederán a lo largo de la serie y que lo movilizarán mucho, generando una conciencia y una apertura de mente que muchos vamos a necesitar en la época de postconflicto que se vienen.  ¿Cree que la serie aporta en época de diálogos de paz? Se usa ahora la frase ‘pedagogía para la paz’, pero independientemente de lo que se sepa, la actitud con la que se piensa en el postconflicto es fundamental. Quizás no sepa mucho del conflicto, de quien tiene más razón que el otro, pero lo fundamental sin duda será la actitud que asumamos frente a ello. Todos en algún momento de nuestra vida hicimos cosas que a lo mejor no están tan bien y que quisiéramos cambiar. Todos sabemos la necesidad de rehacer algo y lo difícil que es. Muchos lo hemos hecho gracias a la ayuda y comprensión de los demás, porque nada se ha hecho sólo. ¿Cómo ha sido el trabajo dentro de esta producción? Muy bueno, muy cómodo, donde se puede aportar, opinar y hablar, con un equipo muy creativo y unos grandes libretos, muy generosos. Creo que eso también se nota en la pantalla. ¿Qué viene después de 'La Niña? Quizás tenga un proyecto más en televisión para este año, pero la prioridad será salir a rodar por Colombia con la obra de Ernesto Calzadilla, que se llama ‘Ernesto Calzadilla como Dios lo trajo al mundo’, un stand up comedy, que lo presentamos el año pasado y que ahora estamos planeando una gira por distintas ciudades del país. Además, quiero hacer un viaje por tierra hasta La Patagonia, para desconectarme, encontrarme con gente de todos lados, personas sencillas y ver qué depara el día a día sin mucha planificación. ¿En qué lo hará? En motocicleta. Será una especie del viaje del Che Guevara pero del norte hacia el sur (risas). Me daré mucho tiempo para hacerlo, porque todos los viajes que haces en definitiva son un viaje hacia tu propio interior, para pasar por Cuzco, las líneas de Nazca, con lugares sagrados de Ecuador y Bolivia, con gente hermosa con quienes tan sólo te quedas viendo hacia el horizonte y ya es toda una experiencia. ¿Con quién lo irá? Puedo empezarlo con algunas personas que están interesadas en hacerlo, pero también podría hacerlo solo, porque la idea es tomarme todo el tiempo necesario y hacerlo de ida y vuelta. ¿Cómo va con el manejo de la moto? La estamos preparando. Nada se puede dejar al azar, hay que aprender de ella, conocerla, tengo que saber desarmarla y armarla, así como manejarla en ruta y con el equipaje a cuestas.

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