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Lecciones del 'Flaco' Solórzano y Flavia Dos Santos para que le vaya bien en la cama

A propósito de su nueva obra, El País les pidió unos cuantos consejos para tener buen sexo. Esto nos dijeron.

6 de diciembre de 2015 Por: Redacción de El País

A propósito de su nueva obra, El País les pidió unos cuantos consejos para tener buen sexo. Esto nos dijeron.

‘La historia ilustrada del sexo’, puesta en escena protagonizada por la sexóloga Flavia Dos Santos y el actor  Fernando ‘El Flaco’ Solórzano, explica a través de las  posiciones del famoso Kamasutra cómo se modificó la forma de relacionarse con el mundo y con la pareja. 

El País habló con Flavia y el 'Flaco' Solórzano para que dieran consejos a nuestros lectores para tener buen sexo y esto nos contaron. 

Si quiere escucharlos directamente de ellos, la cita en Cali será este miércoles 16 de diciembre a las 7:00 p.m. Y 9:00 p.m., en el teatro Jorge Isaacs. La boletería ya está disponible en Colboletos y en la taquilla  del Teatro.

"El sexo siempre debe ser acordado”: Flavia Do Santos

¿Cómo llegó al proyecto?

Un día Dago García me llamó y me preguntó si yo me le mediría a un proyecto en el que estaba trabajando. De inmediato le dije “claro”, pero también le recalqué que no soy actriz. Él me dio la oportunidad y aquí estamos. 

¿Su coprotagonista la intimidó?

En el principio sí, es que él es muy grande. Además con él me enfrenté a 25 años de experiencia contra cinco minutos. Al principio pensé que le iba a parecer una tortura trabajar conmigo, y de repeso yo tenía que bailar. Pero al final nos llevamos muy bien, es un caballero, no conozco a nadie que no se lleve bien con él, siempre está tranquilo, nunca lo ves de mal humor. 

¿De la historia del sexo qué es lo que más le llama la atención?

Me encanta la Edad Media porque es una parte bastante chistosa de una realidad que duró diez siglos de control sexual, de castigos y mucha dificultad en el terreno de la sexualidad. El trabajo investigativo fue muy bueno por lo que se logró ponerle bastante diversión y picante al guion.

En su experiencia, ¿cuál ha sido el mito o la creencia sexual más absurda con la que se ha encontrado?

Que la mujer no sentía placer y no se lo  podía permitir, que esto  fuera solo para los hombres es de las cosas más absurdas de la historia. En la actualidad una de las cosas que más me impactan es que hay personas, no solo mujeres, que dejan de vivir su sexualidad por miedo a lo que vayan a pensar los otros.

¿Qué opina del porno?

Es muy útil, es una herramienta importante en tratamientos de pareja, para algunos sirve pero para otros no.  Ocurre lo mismo que con el arte: uno puede mirar un cuadro como  erótico y  otro como pornográfico. 

¿Qué le cambiaría?

Yo pondría más gente real. Hoy en día la industria porno está en crisis porque la gente que hace las películas caseras ha logrado capturar la realidad y eso ha gustado. Tal vez la industria deba replantear un poco y brindar más realidad, penes normales, vajinas que no sean previamente diseñadas... Hay que traer la verdad a la pantalla. 

¿Qué tema le sonroja?

La violencia. No entiendo cómo la gente puede aceptar ver guerras y todas esas cosas malas que pasan en el mundo.

¿Qué no se debe permitir en el sexo?

 Una relación de poder y control. Todo es válido siempre y cuando las dos personas tengan el mismo nivel de poder y control y estén de acuerdo. Dicho esto, tú no puedes poner tu deseo por encima  del otro, como  en la pedofilia, las violaciones y la zoofilia, porque la otra parte no está en condiciones de tomar una decisión.

¿Con qué frecuencia se habla de sexo en su casa? 

La verdad es que se habla tanto, que mis hijos ya no quieren escuchar más del tema.  Hace días llegué  con montones de unos condones muy interesantes que fueron premiados por la fundación de Bill Gates,   y quería mostrarles cómo eran, pero ellos están un poco apáticos, les parece que ya han escuchado suficiente.

¿Qué opina del sexo en la primera cita?

Depende de lo que piense cada persona. Si hay deseo no pasa nada, no hay una ley que dice que no lo puedas hacer, pero   hay que respetar los deseos y los propios instintos. Si uno tiene  cita con una intención escondida y al  encontrarse ya está pensando en el matrimonio y los hijos, la  sexualidad solo será  empleada como arma de manipulación. Lo mismo sucede si logras un momento de conexión, pero lo cortas con la intención de que te llame mañana. Lo que yo recomiendo es disfrutar de cada momento.  

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¿Avala el sexo con los ex?

A algunos les va muy bien eso de cangregear, pero hay  que analizar por qué se da: en algunos casos es porque las parejas no han logrado concretar un fin, y eso tal vez  impide que sigan adelante con sus vidas. Se debe ver si es algo momentáneo o si es algo que están utilizando para mantenerse congelados.

De la misma forma que se  invierte tiempo y creatividad en  el trabajo o en atender a  los amigos, hay que hacerlo  con el sexo”, Flavia Do Santos, sexóloga y presentadora.

"Mi fetiche son los tacones": 'Flaco' Solórzano

¿Cómo surgió la idea de la obra?

Hace tiempo me hicieron la propuesta que en un principio era con Paola Turbay y me gustó. Pasó un tiempo, Dago me mandó el libreto que parecía una conferencia y me dijo “La vamos a hacer con Flavia”, y  me pareció lo indicado, porque no es una obra de teatro, no hay que hacer interpretación de emociones, sino que es algo textual. Yo tengo un personaje que he ido creando, son varias formas de expresión y recurro a formas que conozco para darle un tono diferente a cada capítulo.

Eso hace que sea posible la participación de Flavia...

Yo tengo  un tono diferente para hablar  de la Edad Media, del Romanticismo, a los años 70. Flavia no, porque si se pone a meterse en algo que ella no conoce comienza a verse falsa. Ella es conferencista, sexóloga, tiene carisma, tiene picante, es muy expresiva.

¿Cómo fue la química entre ustedes?

Ella es como los cariocas, muy buena onda. Siempre que te ve te dice ‘Hola, cómo estás, cómo te va’, con mucho desparpajo y como si te conociera desde hacía tiempo. Cuando empezamos estaba un poco nerviosa, por eso ensayamos mucho. 

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 ¿Es también la primera vez que usted habla de sexo?

Es la primera vez que lo leo y me suena divertidísimo. No sabía si iba a ser un poco ofensivo para la gente, porque hablamos de  cosas como las seis posiciones sexuales rarísimas, que te las están mostrando al frente, tal como lo hace el canal Playboy. Yo soy un poco trasgresor, a mí me interesaba hablar de cosas que incomodaran,  más que el éxito comercial. 

¿Por qué cree necesario hablarlo?

El sexo siempre me ha parecido un espacio íntimo que se volvió complicadísimo. La sociedad ha creado una cantidad de fuerzas para reprimir todo lo que se llame deseo sexual, empezando por una iglesia que tenemos y que le da  duro  a la mujer:  ‘Ella está aquí es para hacer hijos y eso del orgasmo de la mujer no, chito, chito’,  quisiera  oír a mi abuela hablando de la palabra orgasmo o a mi mamá. Ahorita  hay una generación que es diferente. Pero tenemos unas represiones muy bravas. 

¿Cómo cuáles?

¿Usted sabe en qué momento en Estados Unidos la masturbación deja de ser considerada una enfermedad? En 1958. Ya estábamos en la época atómica y se seguía viendo la masturbación como un problema. Hay libros que decían que las enfermedades más graves del género humano provenían de la masturbación. 

¿Y cómo fue la reacción del público?

Hicimos el estreno y  Flavia me preguntaba: ‘Dios mío, Dios mío, ¿se irán a reír? ¿A ti te da risa esto Flaco?’. Había muchos colombianismos. Los hombres hacen charlas pesadas sobre sexo. Y  a cierta posición alguno le dice: ‘Eso es la lechona boca arriba’ y la mujer hace ‘Uich’, o sea, qué grosería, qué asco, guácala. Son chistes muy masculinos, porque Dago en ese sentido tiene una línea más machista. Cuando arranca la obra me doy cuenta  de que  los hombres  están serios  y las mujeres, todo lo contrario, se ríen  a carcajadas.

¿Qué otros descubrimientos hizo en materia sexual a través de la obra?

Que a uno le gusta bastante el sexo (risas),  y que podría ser un punto de cercanía entre las parejas interesante, que podría ayudar a la interrelación entre las parejas.  Las mujeres viven preguntando cosas sobre sexo. El hombre, supuestamente, lo sabe todo y no pregunta nada. La mujer siempre está preguntando. 

¿Cree que el mejor afrodisíaco para el sexo es el amor?

Si uno se pone a desmenuzar qué es el amor… es un concepto universal, pero  llamémoslo enamoramiento, ese gusto por la otra persona, que es el mejor, te carga de una energía y es más sabroso, más rico, más chévere.

¿Qué piensa de todas las prácticas sexuales  que ha suscitado la tecnología, como ‘dogging’ y ‘sexting’?

Antes estábamos hablando  de una represión fuerte y ahora, con Internet, estamos hablando de una apertura casi  con todo, sin control.  En mi caso  nunca tuve una educación por parte de mi papá, no se tocaba el tema. A mí, al no  haber tenido esa proximidad, me cuesta mucho hablar con mis hijos de sexo.  A pesar de que lo pienso y lo siento como necesidad.

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