Los trucos del mago Oz

'El poderoso Oz' es la primera parte de una trilogía con la que el director Sam Raimi aborda la mágica aventura en el reino de Oz. Una explosión visual de colores y efectos que recrea atmósferas cargas de personajes originales que adornan una historia inmensa.

Que una historia sea sacada del baúl de los recuerdos y vuelta a contar no es consecuencia de la aridez creativa. Las historias son como peces que nadan en el océano de las ideas esperando que alguien las pesque y así convertirse en un argumento, y ¿por qué no? En una película. La manera de contarlas es otra cosa y tiene que ver un poco con el autor, con su postura frente al mundo y, por supuesto, la manera como sepa negociar con la cuchara. Continuando con el ejemplo, es tranquilizador saber que siempre habrá historias grandes, chicas, clásicas, originales y repetidas, que cumplirán con su más loable principio de llenar los estómagos de espectadores hambrientos. Entonces volver a tener en la pantalla una historia que de alguna manera reconocemos, no es tan malo como parece. Incluso tenemos a nuestro favor la complicidad del que siente cercanos a los protagonistas y puede adelantarse a la acción. En los últimos años nos hemos encontrado con una serie de cuentos infantiles que ahora son abordados desde otro punto de vista. 'Espejito, espejito', 'Blancanieves y el cazador', por ejemplo nos ofrecen una mirada refrescante a los clásicos y ahondan un poco más en los protagonistas y quienes se les oponen. A estas ahora podríamos sumar la historia de 'El mago de Oz', una novela infantil escrita por Lyman Frank Baum a comienzos de 1900 y que ha sido contada una y otra vez de diferentes maneras y en diversos formatos. Del blanco y negro al color, del musical al cómic, del cortometraje al largo, sin perder su esencia. 'El poderoso Oz', se perfiló como el éxito taquillero que es, desde el momento mismo de su producción. Su argumento no menos original y lleno de pirotécnica se basa en el origen del consabido mago de la gran cabeza humeante que es Oz dentro del reino. La anécdota pretende ser una 'precuela' de la historia que todos reconocemos: Aquella en la que una niña llamada Dorothy cae en el Reino de Oz por culpa de un tornado y que emprende su aventura acompañada de su perro Toto, un espantapájaros y un hombre de lata. 'El poderoso Oz' empieza sin prisas pero sin pausas. Ubicándonos en un medio de un circo venido a menos lleno de artistas que apenas sobreviven gracias a la generosidad de un público escaso y paupérrimo. Entre la fauna circense está el mago Oscar Diggs, reconocido por sus trucos amañados y por sus trampas. Sueña con convertirse en un mago de verdad, famoso e insuperable pero sus propósitos se acomodan al chantaje de algunos integrantes del público que, a cambio de unas cuantas monedas, repiten el libreto que él prepara para ellos. Sus engaños dominan también su vida personal ya Diggs parece importarle poco engañar a las mujeres con un mismo truco a cambio de conseguir de ellas cuanto desea. Un buen día la vida le da otra oportunidad y un tornado lo lleva al mágico reino de Oz, donde las cosas funcionan de otra manera muy diferente. Allí, el tramposo Diggs resulta ser parte de una profecía que el pueblo ha contemplado por décadas: Él es aquel que caería del cielo y vendría a rescatarlos. Sin creerlo mucho, pero gozando de los beneficios de su momento de gloria, Oz asume su nueva personalidad intentando adaptarse como mejor puede. Tal como se plantea, 'El poderoso Oz' es bastante parecida a 'Las aventuras del Mago de Oz' película cuyos derechos hacen parte del legado de Disney, que es también la productora de esta nueva versión. No por eso el equipo creativo de 'El poderoso Oz' tuvo una licencia abierta para hacer lo que quiera con la historia. Sucedió todo lo contrario. Tuvo una serie de limitaciones con respecto a algunos elementos narrativos reconocibles como las clásicas zapatillas rojas. Esta excusa narrativa de poner al protagonista en otro medio diferente al suyo es conocida como 'el pez fuera del agua' y permite al espectador descubrir a la par del protagonista el nuevo universo. Un medio en el que no tienen pasado y en el que su vida se presenta como lienzo en blanco en el pueden dibujar lo que mejor les plazca. Lo importante es lo que ellos hacen por el medio y lo que el medio hace en ellos, convirtiéndolos en otro ser diferente al que llegó. Un esquema narrativo muy utilizado en las películas infantiles como 'Las crónicas de Narnia' o 'Cars', por solo mencionar un par de ellas.Pero más allá de la forma como 'El poderoso Oz' está contada, vale más la pena dejarse llevar por el viaje y sumergirse en el mundo colorido y brillante que la película ofrece. Un lugar iluminado y esperanzador en el que las soluciones ingenuas no molestan. Aquí la polarización del bien y del mal identificado con lo bello y lo feo son claros referentes así como claros son los mensajes. Aquí la bruja es verde y vuela en escoba. Dirigida por Sam Raimi, el mismo de la trilogía de 'El hombre araña', y actuada por James Franco (Harry en 'El hombre Araña') en el papel de Oz, esta colorida producción explota al máximo la tecnología permitiéndonos disfrutar de un verdadero viaje a la maravillosa Tierra de Oz. Esta es la primera de Tres.