10 errores clásicos en redes sociales: manual para no ser víctima de sus publicaciones

Ser políticamente correcto en redes sociales nunca fue tan necesario. Piense antes de actuar y recuerde que una publicación puedeser vista por millones de usuarios.

Ser políticamente correcto en redes sociales nunca fue tan necesario. No sea víctima de sus propias publicaciones.

Cuide su intimidad y la de su familia. Piense antes de actuar  y recuerde que una publicación puede ser vista por millones de usuarios.

1. Desnudos

Kim Kardashian y sus hermanas se han propuesto en varias ocasiones publicar imágenes sin ropa con el fin de colapsar internet, y lo han conseguido. Sin embargo, incluso ellas han sido criticadas por exponer su cuerpo sin necesidad alguna. Instagram de hecho, prohibió las fotos de desnudos íntegros y parciales porque la aplicación esta clasificada para mayores de 12 años, no para mayores de 17.

2. Fotos con armas

Varias personas han sido denunciadas e incluso capturadas por publicar fotos con armas en sus cuentas personales. Este tipo de imágenes ocasionan  reacciones violentas. Esta es una practica común entre los delincuentes, bien sea parra infundir temor entre sus posibles víctimas o vanagloriarse de sus crímenes. ¿Aún si es amante de las armas, le gustaría ser considerado en esta categoría? 

3. Sobreexponer a los hijos

Las redes sociales se han convertido en una  herramienta para las personas que comercializan pornografía infantil  y los pederastas. El ‘morphing’ se trata de una práctica según la cual, algunas personas copian fotos sacadas de Internet y realizan un montaje fotográfico con una fotografía pornográfica. Verifique su configuración de seguridad y el contenido que publica.

4. Criticar a la empresa

Es muy común que el área de recursos humanos de las empresas monitorea  las redes sociales de sus empleados, con el fin de verificar la imagen corporativa que proyectan al resto del mundo. Criticar o proporcionar información confidencial de la empresa, no solo podría dañar el ambiente laboral, sino ocasionar el despido o truncar una futura contratación.

5. Imágenes de animales muertos

Puede que la caza sea una práctica milenaria que provoque satisfacción a algunas personas. Sin embargo, imágenes con la ‘presa’ derrotada puso en aprietos al mismo rey Juan Carlos de España. Los contenidos que demuestran violencia animal generan rechazo y por consiguiente más violencia. Invitamos a promover el respeto hacia los animales.

6. Mala energía 

Si a usted le molestan repetidamente las publicaciones de varios de sus contactos, en lugar de vaciar su mala energía en cada uno de sus contenidos, haga uso de la herramienta ‘bloqueo’ u ‘ocultar’ en el menú de configuración. Evite al máximo enfrascarse en discusiones en las que su argumento sea la molestía por “el exceso de felicidad de la otra persona”.

7. No se ponga muy personal 

Recuerde que el muro lo puede ver mucha gente y el problema surge cuando se publican asuntos personales y privados que no deben ser compartidos. Antes de enviar un mensaje que todos pueden ver, analice si es algo que se puede compartir con familia o amigos. Recuerde que muchas veces las bromas no son muy bien recibidas.

8. Información personal 

Por cuestiones de seguridad evite publicar su fecha de nacimiento completa, sus teléfonos, contraseñas, sus números de documentos o tarjetas de crédito y su dirección. Si sale de vacaciones no publique de inmediato la información que le permita a los delincuentes saber que su casa está sola y que  por lo tanto es un buen blanco.

9. Cuidado con la actualización 

Evite publicar información con georeferencias automáticas. El  teléfono puede grabar la ubicación de todas las imágenes que se toman  sin saberlo. De igual forma, al etiquetar a otra persona en un nuevo estado o imagen, lo mejor es consultar primero si está de acuerdo, así evitará poner en aprietos la privacidad de esa persona.  

10. Opiniones

Es válido decir lo que se piensa, pero antes medite un poco el daño que esto puede ocasionar a otras personas. En redes también aplica la regla de no ofender por política, religión, preferencias sexuales, posición socioeconómica o  etnia. No diga nada que no le gustaría que le dijeran. Tampoco se preste para ofender a otras personas retwiteando o compartiendo. ¡Cuidado con los memes!