Los retos del Valle del Cauca en materia de infraestructura

La directora Seccional Occidente Cámara Colombiana de la Infraestructura CCI, María Claudia Álvarez, plantea el panorama de la región en infraestructura.

Todos sabemos que la inversión en infraestructura es un factor clave que genera un impacto positivo en la economía, y contribuye considerablemente con la productividad de todos los sectores. Se estima que un aumento del 1 % del ‘stock’ de carreteras, genera un crecimiento del 0,42 % del PIB y una reducción del 1% en el costo logístico, redundando esto en el aumento del 0,5 % de las exportaciones.No obstante lo anterior y según el último foro económico mundial, la infraestructura en Colombia, es una área crítica en materia de competitividad, dado que de 133 países, nuestra nación ocupa el no muy honroso puesto 83, siendo los componentes de mayor rezago el tema portuario en el puesto 107, el tema vial en el 101, férreo en el 99, aéreo en el 81, telecomunicaciones en el 76 y en una mejor ubicación se encuentra la infraestructura eléctrica, en el puesto 58.Pese a esas cifras, debemos reconocer que las cosas han empezado a cambiar tanto en el país como en nuestra región, aunque aún nos falta la estructura necesaria para mejorar la conectividad del país con los mercados nacionales e internacionales, y en nuestro caso, aprovechar realmente la excelente ubicación geoestratégica del Valle del Cauca en la Cuenca del Pacífico.Nuestro Departamento debe liderar la promoción de una infraestructura moderna y eficiente para la región, que tiene el inmenso compromiso de ser la puerta de entrada al Pacífico, el océano del futuro.La infraestructura aéreaLos vallecaucanos hemos dado un gran paso hacia la consolidación de la infraestructura aérea, pues están a punto de iniciar las obras que se emprenderán en el Aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, para ubicarlo en el nivel que se merece el segundo aeropuerto del país. La infraestructura vialEn materia vial, y principalmente por ser los pilares de la conectividad con Buenaventura, el Valle del Cauca tiene dos asignaturas pendientes, que no puede cumplir sin el concurso del Gobierno Nacional: La doble calzada Buga Buenaventura y la concesión de cuarta generación Mulaló – Loboguerrero.Aunque la doble calzada al puerto de Buenaventura es hoy el proyecto vial más importante para la competitividad del país, el mismo ha tenido un compendio de dificultades que ha impedido la ágil construcción que requiere el comercio exterior: El surgimiento casi diario de comunidades que reclaman posesión de tierras a lo largo de la carretera, las dificultades para acceder a licencias ambientales, la minería ilegal, las limitantes presupuestales de las obras, entre otros. Pese a que el Observatorio de la Infraestructura del Valle del Cauca vela cotidianamente por atenuar las dificultades, debe ser un propósito del Gobierno Nacional que todas las dependencias que actúan en la obra trabajen articulada y ágilmente para que las obras avancen.La vía Mulaló – Loboguerrero, que el Valle del Cauca ha promovido durante décadas, buscando acortar en aproximadamente 40 minutos el viaje al puerto de Buenaventura, aún no ha emprendido su proceso licitatorio.Fue estimulante para los empresarios del Valle del Cauca conocer que el proyecto forma parte del paquete de concesiones de cuarta generación que por más de $50 billones está impulsando la Agencia Nacional de la Infraestructura, ANI, y más aún, que era la primera de las “victorias tempranas” que iba a salir a licitación.Desafortunadamente, Mulaló Loboguerrero no fue la primera victoria temprana a ser contratada en ese paquete de obras como se había anunciado, y ha sufrido cuatro aplazamientos del proceso licitatorio, una vez se conocieron los diez consorcios precalificados para su construcción. Se espera que las próximas noticias vayan ligadas al ajuste de las unidades funcionales, para que cierre financieramente el proyecto.La infraestructura portuariaEn materia de infraestructura portuaria, el Valle del Cauca cuenta con inversionistas privados comprometidos con Buenaventura, que garantizan el desarrollo de las terminales portuarias de las que goza nuestro departamento.La infraestructura de CaliRespecto a la infraestructura de Cali, vemos con satisfacción cómo ha cambiado la ciudad en los últimos años, gracias a los avances viales y urbanísticos, evidenciados en obras como el Boulevard de la Avenida Colombia y el túnel mundialista, el puente de la Calle 8 con Carrera 70, la Plazoleta Jairo Varela, entre otras, que suman una inversión no registrada antes para la ciudad. Pero el progreso de Cali en la materia apenas inicia, teniendo en cuenta que existen otros proyectos que aún no se construyen, tales como el Jarillón del Río Cauca, la Ecociudad Navarro, el Corredor Verde, el Anillo Perimetral, la culminación del Masivo Integrado de Occidente MÍO y la segunda fase de las obras por valorización.La consolidación del MÍO como uno de los Sistemas de Transporte Masivo ejemplo para el mundo, deja de lado el modelo tradicional de servicio, para enrrutar la ciudad en una experiencia de movilidad urbana de pasajeros organizada. El principal reto del MÍO es lograr el equilibrio financiero en su operación, para lo cual es imperativo que salgan de circulación los buses colectivos, para que el Masivo pueda superar la prolongada crisis que vive por el paralelismo.Adicionalmente, se debe mencionar la entrega de Emcali y la garantía en inversión por el orden de 1 billón de pesos de la Nación como parte del proceso de devolución. La implementación del Modelo de Abastecimiento Estratégico que acaba de presentar Emcali garantiza que sus proveedores se conviertan a futuro en aliados estratégicos, con el consecuente beneficio para la empresa en tiempos y especialmente, en el ahorro que finalmente representará mayor inversión para Cali.Son muchos más los temas de infraestructura que se podrían mencionar, como por ejemplo las obras del contrato plan, las de las regalías, las del Invías, las de valorización, pero el espacio solo nos permite concluir que unidos podemos buscar un mejor futuro para la región, porque la unión hace la infraestructura y la infraestructura es desarrollo.