El pais
SUSCRÍBETE

Juegos de azar, historias de poca probabilidad y mucho chance

¿Por qué cae un número y no otro en la lotería y el chance? Nadie lo sabe. Pero es una mezcla de suerte, fe y matemáticas.

6 de marzo de 2011 Por: Elpais.com.co

¿Por qué cae un número y no otro en la lotería y el chance? Nadie lo sabe. Pero es una mezcla de suerte, fe y matemáticas.

Aquel miércoles nadie le jaló el cuello al ganso, ninguna persona se encontró una moneda con la cara arriba, ni mucho menos se vieron elefantes con la trompa alzada, pero aquel día la suerte apareció sin compasión y más de 18.000 personas se abrazaron a ella a través del dinero que les dio un chance.Pero ese 23 de febrero, cuando las balotas de la Lotería del Valle sellaron la suerte con el número 7128, Cali sintió el ahogo del grito. No por los cuatro números, cuyo 7 es mágico a la fortuna, sino con los tres últimos que, el mes pasado, era más que una cábala escriturada.Entonces, salieron las historias: el Salmo 128 dice: “¡Bienaventurado serás, y te irá bien”. El uno es el último número del año (2011) o el primer mes del año (enero), mientras el 28 es el número de días que tiene febrero. Ante eso las conjugaciones no se hicieron esperar y el rumor terminó en lo cierto: ¡Se jugó y cayó el chance!María Belén Soto, del barrio Marroquín, le apostó al número porque cumplía ese día 28 años y estuvo entre el tres y el uno para ponerlo adelante y así jugarlo. “Me decidí por el uno porque mi hijo tiene esa edad. No fue por nada más, y me salió”. Al otro día reclamó su premio: $350.000. Curiosamente, ese día la Lotería de Manizales salió con el número 9821, es decir, con el 128 al revés. En el Chontico, de día y noche, se repitieron el 1 y el 2, mientras en otros juegos como Astro Sol y Cachaco cayeron el 8 y el 2 en el número y en el Astro Luna volvió otra vez el 1 y el 2. Según John Evert Herrera, director comercial de Gane, entidad que agrupa a los chanceros de Cali, “el juego de azar es una mezcla de cultura de cábalas, agüeros y fe. ¿Por qué cae determinado número? Nadie lo sabe, pero cae y hay ganadores. ¿Se la juegan a la fe? No lo sabemos”. Herrera dice que hacía dos años no les metían una ‘pela’ como la de ese miércoles. “Pero ese es el juego”. ‘Pela’ le llaman cuando hay múltiples ganadores.Chanceros estiman que la cifra que pagó Gane alcanzó los $10.000 millones entregados a los ganadores. Hay que decir que el número se bloqueó pasadas las 7:30 p.m., según Eulalia Vergara, quien no pudo jugarle al número y perdió su chance de ganar. “En Terrón Colorado se regó que era el número ganador, y de verdad era”.Chance de cábalasTodos los números son buenos, dicen los astrólogos. Pero en los juegos de azar imperan unos más que otros. Los cabalísticos en la lotería y en el chance son: 5, 7 y 8. En la Biblia, según apostadores, el 5 es multiplicación, el 7 es el de la magia y el 8 el de la abundancia. Poco se apuesta al 6, que es el del demonio, como tampoco al 1 ó al 9 que son los de Dios.Según Amparo Gil, directora comercial de la Beneficencia del Valle, “la suerte parte de las probabilidades, pero siempre hay un juego entre la fe y la asociación de números. De allí sale la apuesta”. Cristo Ulloa, viejo lotero del sur de Cali, admite que un número clásico de apuesta es el 911 ó el 119 y se debe a la fecha del derrumbe de las Torres Gemelas (11 de septiembre de 2001). “Un número cíclico en la lotería y el chance y que cae mucho es el 945, que no es más que la suma de los dos últimos números”. Sin embargo, nadie se explica por qué cae tantas veces. En el Baloto, por ejemplo, desde que se hizo el primer juego en el 2001 y que alcanza los 1.030 sorteos, según Cristo, los números que más han caído son el 19 y el 28. En los sorteos de diciembre y noviembre pasado cayó el 19 en cinco ocasiones, toda vez que se juega hasta el 45. Otras cifras que se juegan son las ‘escaleras’: 321, 654 ó 789.Pero, hay personas que prefieren jugar con los números de las fechas que van desde 1940 a 1970, que son números que se asocian a las fechas de nacimiento de los apostadores. De allí, que los jugadores estén en el rango de los 40 y 70 años, especialmente mujeres. Otra cábala son los números que no han caído, pero eso lo sabe sólo el chancero, quien conoce la lista de esos números y se lo dicen a sus compradores, y se la juegan con esa cifra. Por ejemplo, uno es el 743.Una de las virtudes del chance que lo hace popular es por las oportunidades de ganar. Mientras el jugador de chance tiene una oportunidad de ganar entre 10.000 probabilidades, en la lotería es entre 6 millones y en el Baloto entre 8 millones. El promedio de la apuesta en Cali asciende a $1.200, pero se ha venido popularizando apostar entre $100 y $500. “No es raro que se apueste $200 ó $300, pero ganan poco dinero e insuficiente. Por eso, arriesgan mayor dinero para de verdad ganar”, dice el representante de Gane.Henry Rojas, gerente de la Beneficencia del Valle, asegura que no hay números vetados, eso es por ley. “Todos los números son jugables. Lo que pasa es que el vendedor o el distribuidor no recibe, por ejemplo, números altos o con ceros. Igual ocurre con el comprador: busca números ‘bonitos’, que le suenen a ganar”. ‘Bonitos’, al parecer, son 7458 ó 1976, mientras los ‘Pacha’, como llaman a los números malos, son 0000 ó 9999. Según Rojas, para que un lotero venda un billete debe ofrecer cinco, igual ocurre con los distribuidores: “Piden 100.000 para vender 25.000. Son cinco por uno”. Y hay agüero. Según la Beneficencia del Valle, de la Lotería del Valle se imprimen cada ocho días 770.000 números con 77 series y de esos 250.000 billetes estarán casi vendidos. “Los distribuidores ( 16 en el Valle) nos exigen determinados números porque ellos tiene abonados fieles que compran”, concluye Rojas. La suerte está jugada. Tal vez este miércoles volverá a salir un número cabalístico y muchos le habrán jugado porque tendrán magia, abundancia y fe. ¿A cuál le jugamos?

AHORA EN Economía