Dian, con la lupa sobre 45.000 fundaciones

El decreto de paraísos fiscales controlará las entidades que no están tributando.

No es algo que ocurra siempre, pero, a veces, el mundo de las finanzas se parece a otros, como el del ajedrez, en el que las tácticas, las estrategias y las jugadas pueden llevar a alguien a ganar la partida Resulta que en Colombia, la Dian identificó a 45.000 fundaciones que están usando su característica de “organización sin ánimo de lucro", con el fin de evadir impuestos y generar dinero para comprar otros bienes. Siendo más claros, según la legislación, las asociaciones sin ánimo de lucro pertenecen a un régimen especial, que no está sujeto al pago de impuestos de renta, siempre y cuando sus excedentes sean reinvertidos totalmente en la actividad de su objeto social.No obstante, estas fundaciones se encuentran usando sus ingresos para actividades lucrativas, de lujo y hasta de diversión, como por ejemplo yates, Maseratis, pago de clubes entre otras cosas.Incluso, se dice que muchas de las organizaciones investigadas pertenecerían presuntamente al exconcejal Andrés Casado, a Julio Gómez e Interbolsa. Algunas de estas son: FunargKo, Funalcer y Fundación Colombia Activa.Ante esta situación, la Dian decidió mover sus fichas para poner en jaque a estas fundaciones. Para eso, utilizará la ayuda del Decreto de paraísos fiscales. Según Juan Ricardo Ortega, director de la entidad, “las principales viviendas de lujo, de $5.000 millones a $7.000 millones están registradas en paraísos fiscales a nombre de fundaciones en el exterior y ese tipo de altruismo va a empezar a ser cuestionado jurídicamente y se van a dar discusiones donde las personas que usufructúan esas viviendas van a tener que declarar y pagar el impuesto al patrimonio”.El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, señaló que el decreto es histórico, porque después de décadas de espera se define la lista de países considerados paraísos fiscales. “Es una norma que hace al país más justo, porque quienes ganen más, pagarán más”, indicó.Este decreto tendrá 4 implicaciones. La primera es que las transacciones con alguien residenciado en un paraíso fiscal estarán sujetas al 33% de retención en la fuente. Lo segundo es que este pago no puede constituirse como costo o deducción para quien está pagando impuestos en Colombia.Así mismo, a las inversiones de portafolio en Colombia que vengan de un paraíso se les practicará una retención de 25%. Finalmente está el tratamiento de los precios de transferencia, según el cual las empresas deben informar a qué costo venden a los países de la lista. Al final, veremos qué jugador gana esta partida.