El pais
SUSCRÍBETE

Cuba da nuevos pasos en su apertura al consumo

Los analisitas aseguran que los cambios son moderados, pero las medidas plantean un giro en la economía.

26 de septiembre de 2010 Por: Francy Elena Chagüendo A. | Reportera de El País

Los analisitas aseguran que los cambios son moderados, pero las medidas plantean un giro en la economía.

Cuando el río suena, piedras lleva, dice un adagio popular, que hoy parece aplicarse a la economía cubana que viene introduciendo cambios que hacen pensar en una apertura del régimen hacia el libre consumo. De hecho, el mismo Fidel Castro lo dijo a principios de este mes: “el modelo económico de Cuba ya no funciona”, aunque luego haya salido a decir que lo habían malinterpretado. Cierto o no, las reformas que ha venido implementando su hermano Raúl Castro desde que asumió la presidencia, demuestran que la economía de ese país está dando un importante giro.El cambio se percibe en el nivel de consumo de sus habitantes. Hoy, por ejemplo, los cubanos cuentan con 1.007.000 celulares, una cifra superior al número de líneas fijas. En el 2003 sólo operaban 43.000 teléfonos inalámbricos entre personas del gobierno, pero desde el 2008 se permitió a todos los ciudadanos acceder a estos equipos móviles.A esta medida se unieron otras como el permiso para alojarse en hoteles que estaban restringidos a los turistas y la posibilidad de comprar artículos en tiendas como electrodomésticos, que antes del 2008 no se podían importar.Asimismo, para estimular la producción agrícola se estableció la entrega de tierras ociosas del Estado a privados y cooperativas. Según estudios de la Universidad de la Habana, hasta diciembre de 2009 se habían dado alrededor de 920.000 hectáreas a más de 100.000 beneficiarios, lo que representa 54% del total del área sin uso.En abril de este año el Gobierno decidió darle vía libre a algunos negocios para que sean manejados por particulares, como la prestación de los servicios de peluquerías y barberías. A cambio los propietarios deben pagar una renta de los locales. También se liberó el consumo de algunos bienes y alimentos. En este mes Raúl Castro presentó un nuevo paquete de medidas para seguir contrarrestando los problemas económicos. El paquete contempla, entre otros puntos, la apertura de más negocios y la autorización para ejercer el trabajo por cuenta propia en 178 renglones de la economía. De ellos 83 podrán contratar empleados. Pero el plan también tiene sus duros ajustes, como el despido de 1.000.000 de empleados estatales, que se hará en dos etapas. Actualización del socialismoLa prensa en el mundo llama a estos cambios como la “actualización” del socialismo, sin embargo, los analistas internacionales no creen mucho en que se trate de una variación en el modelo económico de Cuba.El profesor Pavel Vidal Alejandro, del Centro de Estudios Económicos de la Universidad de la Habana, recoge los principales cambios que ha dado la isla en cuatro temas: la liberación del consumo, la entrega de tierras a privados, flexibilización del mercado laboral y la reorganización institucional. Según explicó en su informe sobre “los cambios estructurales e institucionales”, éstos no representan una modificación sustancial del modelo económico cubano en parte porque se ha desmontado muy parcialmente la centralización, por ejemplo, las autoridades mantienen la fijación de la mayoría de los precios, así como una excesiva cantidad de regulaciones al comercio interno y externo, los flujos financieros y el cambio de divisas que restringen la inversión.Carmelo Mesa-Lago, Catedrático de Economía y Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Pittsburgh, considera que sí se está dando una transformación en el modelo económico, aunque ésta no es profunda. “Es un cambio positivo pero moderado dentro del modelo socialista, pues las reformas que se implantaron en los 90, durante el peor momento de la crisis que siguió a la caída del campo socialista, fueron hasta ahora, más importantes que las actuales”, dijo.Los analistas además cuestionan el real efecto que han tenido las medidas adoptadas, por ejemplo, explicó Carmelo Mesa, que la distribución de tierras ociosas del Estado tiene muchas restricciones y que la generación de empleo propio no será fácil porque se imponen impuestos entre 10% y 40% de las ganancias, más 25% para la seguridad social, lo que estima es una carga muy pesada y no hay suficientes incentivos.Carlos Martínez Becerra, decano de Economía de la Universidad Santo Tomás asegura que Cuba no está dando un giro en su modelo económico, pues lo que hace Castro es tomar medidas para afrontar la crisis de la economía, como lo ha hecho el resto de países en el mundo.“Estados Unidos dice compre en América con una posición proteccionista y Cuba lo que hace, ante la crisis, es rebajar los gastos públicos y trasladar algunas actividades económicas a las pymes”.En ningún momento, afirmó el docente, el Estado se ausenta de la regulación, y aunque se dictan medidas de ajuste, no abandona el tema de intervención o lo hace por otra vía.“No creo que Cuba esté negando su modelo socialista, pero cada día los ajustes son mayores”, afirmó Martínez. Por ahora el río sigue sonando y lo cierto es que el Gobierno continuará introduciendo más cambios.

AHORA EN Economía