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¿Se quedará Camilo Villegas de brazos cruzados?

El exceso de técnica sería la causa del bajón del golfista colombiano que está a punto de perder su tarjeta en el PGA. Para otros eso es parte del paisaje en los campos de golf.

13 de octubre de 2012 Por: ALDA MERA - Reportera de El País

El exceso de técnica sería la causa del bajón del golfista colombiano que está a punto de perder su tarjeta en el PGA. Para otros eso es parte del paisaje en los campos de golf.

El riesgo de que Camilo Villegas pierda su tarjeta PGA se ha convertido casi en un problema nacional. Los colombianos, así no dominen mucho el tema del golf, no toleran la idea de que el mejor exponente que ha tenido el país en la élite mundial de este deporte esté a punto “del descenso”.Y todos se preguntan qué le pasó, si venía de jugar tan bien las temporadas 2008, 2009 e incluso la del 2010. Unos le echan la culpa a los cambios de ‘caddie’ desde que Brett Waldman se volvió profesional; otros, al cambio de swing, y otros, a los palos y hasta las bolas.Expertos como Francisco Alemán, comentarista de Espn especializado en golf, dicen que esos bajones los tienen hasta los mejores jugadores del mundo, en todas las disciplinas deportivas, más en el golf, un deporte tan complejo.Sin embargo, Rogelio González, quien fuera su profesor de golf desde que Camilo era un niño, considera que a veces tanta técnica absorbe al jugador como en una especie de remolino. En otras palabras, que esa búsqueda permanente de la perfección, en la que trata de acoger tantas técnicas, puede llevar al mejor jugador del mundo cuesta abajo hasta destruirlo.Esa obsesión por apropiarse de tanto recurso técnico llevaron a que su alumno estrella acabara por perder su golf natural, su swing innato hasta caer a la casilla 199 del ranking mundial, en el que en su mejor momento fue séptimo. Ni qué decir de la lista de ganancias, donde está en el puesto 160. Toda una encrucijada considerando que necesita ascender a la 125 para conservar su carné en el PGA Tour. “El golf es un deporte simple y natural, y la gente lo complica”, sentencia este golfista profesional y profesor del Club Campestre de Medellín y de paso recuerda que algo similar le pasó a su gran amigo, el golfista caleño Eduardo Herrera, del Club Campestre Los Farallones de Cali, quien alguna vez admitió: “Roger, busqué tanto la perfección, que llegó el día que no sabía cómo pegarle a la bola”.En el mundo del golf estadounidense y europeo, dice él, se mueven especialistas en cazar estrellas ya hechas para ejercer como asesores, entrenadores, técnicos o ‘caddies’ y así ganar mucho dinero. “Camilo posiblemente se dejó llevar por el cuento y se dejó enredar con tanta técnica”, sostiene.Su argumento es tan simple como un ‘putt’. Cuando un jugador ha aprendido muchas técnicas, necesita pensar y lo puso a pensar y Camilo no necesitaba pensar. “Eso es como pedirle a (Lionel) Messi, una estrella innata, que juegue así o de otra manera, porque tanta técnica le quita la habilidad natural”, explica González.No piensa ni siente igual Luis Fernando Martínez, ‘Peña’, golfista profesional del Club Campestre de Medellín, quien también conoce a Camilo desde que tenía 6 o 7 años. ‘Peña’, antes cree que Villegas está jugando mejor que antes, que ha ganado en recursos técnicos y que más tarde que nunca saldrá de este hoyo sin fondo en el que ha caído. Sin embargo, Rogelio señala que Camilo pasó de ser uno de los pegadores más largos y ahora ya está de 80 en distancia porque no llega ni a las 300 yardas. Supuesta falencia que para ‘Peña’ es una virtud: justo lo que hizo Camilo fue sacrificar distancia para ganar consistencia, coger dirección y mejorar la precisión en el golpe. “Hace tres o cuatro meses jugué con él un torneo, y sí está pasando por un momento de falta de confianza y siente la presión de no estar entre los 125 del corte del PGA al cierre de temporada, pero técnicamente está jugando bien, le está pegando mejor a la bola”.Ahora, independientemente de ello, los resultados no lo han favorecido porque hay muchos competidores, el nivel es muy bueno y el golf es muy exigente. Para Rogelio, que trabajó con él durante 24 años, el problema no es de ‘caddies’ ni de palos. Sin embargo, tácitamente admite que “si tienes cuatro profesores, cada uno te enseña cuatro cosas distintas y si antes no pensabas, ahora estás en la obligación de pensar (sobre esas técnicas) para jugar”. ‘Peña’ sostiene que no hay que echarle la culpa al ‘caddie’, mucho menos ahora que Camilo tiene a Brennan Little, un experto que le cargó la talega durante diez años a Mike Weir; se la llevan bien, pero el golf es un deporte en el que hasta que no termine el último torneo y no se juegue el último hoyo, no se puede decir nada.Es una competencia en la que en cuatro días (lo que en promedio dura un torneo) le cambia la vida al jugador. “Este bajón lo han tenido hasta los mejores golfistas, incluido Tiger (Woods), unos se demoran más, otros se demoran menos, pero que Camilo sale de esta, sale”, enfatiza ‘Peña’. No obstante, aclara que “los que no saben bien del tema, creen que Camilo está jugando mal y eso no es cierto, la clase de jugador que tenemos es excepcional, así esté en un momento negativo, él es muy importante no sólo por lo que ha hecho, sino por lo que va a hacer, porque estoy seguro de que tarde que temprano volverá a su nivel”. Allí coinciden los especialistas como Alemán: hay que darle tiempo para que reaccione, haga unos cambios radicales y vuelva a recuperar su juego inicial. “Los que sabemos cómo es de hábil e inteligente Camilo, esperamos que retome su juego y que ojalá no pierda la tarjeta”, dice Rogelio, quien compartió con él en Medellín en enero. “Le hice unas ayudas y se fue feliz. Esperemos que tenga la capacidad de volver a su propio golf y que lo disfrute”.El verbo disfrutar suena como un golpe de gracia: “Si usted ve jugar a los primeros del ranking mundial, el número uno, el norirlandés Rory McIlroy; el inglés Luke Donald, tercero en el top 10, y hasta el italiano Francesco Molinari, número 31, todos disfrutan jugar el golf. Pero a Tiger, a Camilo, uno los ve ansiosos, preocupados, nerviosos en el campo”, dice Rogelio.Entonces, la esperanza es que el antioqueño recupere su swing natural, vuelva a su juego innato, se relaje y disfrute los torneos que restan de la temporada. Sólo así podrá mejorar sus resultados y conservar la famosa tarjeta de la PGA, que le evitaría caer en el hueco del ‘descenso’.Voces...* "A veces la gente se deja absorber por tanto tecnicismo. Es extraño que Camilo, siendo tan metódico y tan inteligente, haya caído en este juego”.Rogelio González, golfista y exprofesor de golf de Camilo Villegas en Medellín.* "Jugué un torneo con Camilo (Villegas) este año y lo vi jugar muy bien, así los resultados no le favorezcan; todos los grandes jugadores tienen un bajón así, pero estoy seguro de que él va a salir de esta”. Luis Fernando Martínez, ‘Peña’, golfista profesional.

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