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“Mi bicicleta y yo somos una sola”: Mariana Pajón

Han pasado seis meses desde que ganó el oro olímpico en el BMX en Londres, pero para Mariana la carrera aún no termina. Su vida sigue a millón, aunque eso, dice, hace parte de la cotidianidad.

3 de febrero de 2013 Por: KATERINE MORA HOYOS- Reportera de El País

Han pasado seis meses desde que ganó el oro olímpico en el BMX en Londres, pero para Mariana la carrera aún no termina. Su vida sigue a millón, aunque eso, dice, hace parte de la cotidianidad.

A toda velocidad. Así va la vida de Mariana Pajón Londoño desde aquel 10 de agosto, cuando luego de pedalear durante 38,845 segundos en el tercer ‘heat’ de la final femenina de BMX de Londres 2012, se metió en la historia del olimpismo colombiano al ganar la medalla de oro. ‘Tata’, como es conocida en su entorno familiar, dice que ya no le falta nada por alcanzar en su deporte. Por eso, mantenerse en el más alto nivel es su principal objetivo. Mariana no habla de sacrificios, tampoco de dificultades, sino de un estilo de vida que escogió y que disfruta al máximo. Para ella, estar en medio de carreras, entrenamientos y premiaciones es lo cotidiano. Usted soñaba con ganar una medalla olímpica. ¿Qué cosas nuevas le ha traído la consecución de este logro?"Detrás de una medalla vienen muchas cosas. Me preparé muy bien para ganar una medalla, pero nunca para lo que se venía después. Ha sido una experiencia muy linda, he podido llegar a muchos niños. Es increíble ser un ejemplo para muchos; para mí, es una responsabilidad muy alta. No me esperaba tanto cariño de la gente y eso me parece lo más lindo, más que la medalla".¿Qué es lo mejor que le han dicho en la calle desde que ganó la medalla?"A mí me impresiona que la gente me dé las gracias, una sonrisa. Eso me encanta, me hace sentir feliz y orgullosa. También que un niño me mire con la boca abierta, eso me ha sacado hasta lágrimas".¿Cómo ha manejado la fama desde que ganó la medalla olímpica?"Creo que no es fama, es el cariño de la gente. Estoy muy orgullosa y es un honor gigante poderle dar una alegría así a Colombia. Que un país entero se uniera en torno a una medalla, a una carrera, me hace muy feliz, pero soy la misma Mariana antes y después de la medalla". Además de su talento, su belleza no pasa desapercibida, ¿qué sensaciones le causa esto?"Para mí son muestras de cariño y si es con respeto y admiración, es súper lindo. Igual, los mensajes que me envían trato de responderlos, los leo con honor y admiración".A una deportista de alto rendimiento como usted, ¿a qué hora le queda tiempo para disfrutar de lo cotidiano?"Después de la medalla no he tenido tiempo de disfrutar con mi familia. He podido viajar por Suramérica y Norteamérica, ha sido una experiencia increíble, muy diferente a lo que me imaginé. Para mí, lo que estoy viviendo es lo cotidiano, es la vida que yo elegí, estar en eventos, en premiaciones, en entrenamientos y carreras". Cuando uno cumple una meta tan alta, ¿cómo llega el planteamiento de nuevos retos?"Estoy en un momento en el que alcancé lo máximo, a mí no me falta nada por alcanzar en mi deporte, pero lo más importante es mantenerme ahí y es en lo que vamos a trabajar para seguir dándole alegrías a mi país. Voy a iniciar otro ciclo olímpico y voy a tratar de dar lo mejor de mí. Hay que replantear mis sueños y mis objetivos y volver a hacer lo que me gusta: entrenar muy fuerte para devolverle a Colombia todo esto". ¿Si Mariana no hubiera sido bicicrosista, a qué se hubiera dedicado?"Creo que estaría en otro deporte. Fui gimnasta por cinco años y me encanta, es mi otra pasión. También fui kartista y monté durante muchos años. Entonces, hubiera practicado alguno de esos otros deportes, sin duda alguna practicaría un deporte fuerte". ¿Qué tanto mima su bicicleta, la ‘engalla’, le compra cosas?"Mi bicicleta es lo más preciado, es mi mejor amiga, le hablo, la consiento, la limpio. Mi papá también le hace casi todo porque en él es en quien confío. Cuando viajo con ella, va en una bolsita especial rosada que le tengo, es una talega especial. No tiene ni un solo rayón porque me encanta mantenerla linda y la verdad, cuando yo me monto en ella, somos una sola persona o una sola máquina pedaleando. Somos una sola con ansias de ganar". ¿Con la que ganó la medalla olímpica, la tiene reservada en un lugar especial?"Sí, a esa bicicleta la tengo como un trofeo, junto a la primera bicicleta con la que aprendí a montar. La de los Olímpicos está exactamente como corrí esa última vez en esa final". En Colombia no podemos disfrutarla en competencias porque el bicicross no es tan masivo. ¿Ha hablado con el Gobierno con respecto a esto?"Sí. Me parece triste no tener una pista de supercross, ni siquiera tenemos la modalidad con la que gané en los Olímpicos. Pero ya ha empezado a desarrollarse y por lo menos la gente ya sabe lo que es BMX y les llama la atención. En los Juegos Nacionales les insistí mucho que si no había deportistas para correr, que al menos hiciéramos una carrera de exhibición, así más niños se iban a animar. Falta un poco de empuje y de creer que este deporte puede ser masivo en este país y apoyarlo". ¿Qué tan vanidosa es?"Demasiado. Cuando no estoy compitiendo soy muy vanidosa. Me cuido mucho el pelo, me encanta arreglarme las uñas. Hasta me maquillo para ir a entrenar, me gusta estar bien y comportarme como una mujer porque eso es lo que soy. Aunque haga un deporte rudo y de contacto, una mujer es la que está detrás de ese casco".Detrás de esa medalla, ¿cuántos años de sacrificio hay?"Para ganar la medalla, primero no hay sacrificios porque tu escogiste una vida diferente. Entonces, todo es en torno a un sueño. Desde pequeña me levantaba a las 3:30 de la mañana para entrenar antes de ir al colegio, por la tarde volvía. Incluso, a veces dejaba de ir a piñatas de mis amiguitos para ir a entrenamientos y no perder un día de entrenamiento, porque ahí se pierde todo el proceso. También viví sola en Estados Unidos desde los 10 años sin mis papás para correr y aprender inglés. Fue un esfuerzo muy grande que ahora se vio recompensado".¿Su vida sentimental va al mismo ritmo que su carrera?"Estoy bien por ahora. No tengo tiempo para mí, menos para otra persona. Y suena triste y difícil, pero llegará esa persona especial y madura que entienda y tenga los mismas ideales y objetivos míos, que hablemos el mismo idioma, que tengamos las mismas ganas de superarnos y obtener grandes cosas".¿Este año, cuál es su principal meta?"Yo asumo todas las competencias igual y este año tenemos demasiadas. Volveré al equipo de Estados Unidos en el que estuve a los 10 años y correré por marcas colombianas avaladas por la UCI. También estaré en cinco copas mundo, el Campeonato Mundial en Nueva Zelanda, el Panamericano en Argentina, los Bolivarianos en Perú. Además de las competencias colombianas, porque me gusta correrlas todas".En AustriaPor estos días, Mariana Pajón se encuentra en Austria, donde asiste al Centro de Alto Rendimiento de Red Bull. De acuerdo con Pajón, que es patrocinada por la marca, “es ahí donde voy a iniciar mi ciclo olímpico nuevo. Me van a hacer unos exámenes y pruebas especiales para saber en qué nivel estoy y qué falta para mejorar. Es un centro especializado para deportistas de alto rendimiento”.Frases* “Soy madura en mi deporte, pero sigo siendo la niña de la casa. Todavía veo televisión con mis papás hasta tarde en la cama. Tengo dos facetas y me encanta combinarlas”.* "Aunque aún falta mucho para el desarrollo del bicicross en el país, vamos por muy buen camino y hay muchas ideas de construcción de pistas; eso me pone muy feliz”.Mariana Pajón Londoño, Bicicrosista colombiana.

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