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Eduardo Lara aprovecha el tiempo para compartir con su hija Mariana, próxima a cumplir 2 años. | Foto: Archivo particular

DEPORTES

Temores y reflexiones de Eduardo Lara, técnico de El Nacional de Ecuador, con lo que hoy vive el mundo

Eduardo Lara llegó a comienzos de año a Ecuador para dirigir a El Nacional.

13 de abril de 2020 Por: Francisco Henao Bolívar, reportero de El País

Eduardo Lara permanece 'acuartelado' en su apartamento en Cumbayá, una pequeña ciudad a 15 minutos de Quito, y que ya tiene varios contagiados de coronavirus.

El técnico vallecaucano, que está en Ecuador desde comienzo de año dirigiendo a El Nacional, no quiere dar 'papaya', prácticamente no sale a ningún lado porque, como él mismo lo dice, “estamos ante un virus que no sabemos dónde está”.

Lara dice que el encierro ha sido duro y en eso tiene razón, pues es un técnico que se la ha pasado más de 30 años viajando con sus equipos, en concentraciones, de aeropuerto en aeropuerto, entrenando todos los días, dirigiendo los fines de semana y de reunión en reunión para planificar los siguientes compromisos.

Aún así le ve un lado muy positivo a la cuarentena y es disfrutar todo el día de su pequeña hija Mariana, próxima a cumplir 2 años, un privilegio que el fútbol le negó con su primera hija Valentina.

¿Cómo ha llevado esta situación después de una vida de viajes, concentraciones, aeropuertos...?
Tratando de llevar las cosas de la mejor manera, pero ha sido muy complicado por donde uno lo mire; esta es una epidemia que uno no sabe dónde está y dónde la va a encontrar, entonces lo mejor es estar en casa, no salir a la calle. Hay mucho temor, yo estoy en un pueblo (Cumbayá) que está a 15 minutos de Quito. Acá la situación es tranquila, pero en general el tema en Ecuador no es fácil, en Guayaquil es terrible, entonces los que estamos enseñados a salir y trabajar, vamos a tener que aguantarnos un poco.

¿En Cumbayá hay contagiados?
Se habla de entre tres y cuatro personas, pero no es lo que se vive en otras ciudades de Ecuador, como en Guayaquil; en Quito también se ha propagado bastante, lo mismo que en Manta. Acá, por ser pequeño, el tema está tranquilo. Yo prefiero estar en la casa con mi esposa, mi hija y mi suegra, que nos está acompañando. Y pendiente de mi familia en Colombia, de mi hija Valentina, rogando que todo esté bien.

¿Cómo ha hecho para surtirse de los productos necesarios?
Con las normas que implementó el Gobierno acá tengo derecho a salir únicamente los lunes; aprovecho para ir a un supermercado, pero tomo todas las precauciones, lo mismo cuando llego porque la recomendación es desinfectar todas las bolsas y bañarse uno para que no haya algún problema. También está la posibilidad de pedir a domicilio, pero ahí uno no sabe cómo han sido manipuladas las bolsas y el alimento. El tema no deja de ser complejo.

Los técnicos y jugadores no mantienen en casa porque están más metidos en el fútbol. ¿Es difícil adaptarse ahora a un encierro?
En estos días hablaba con el 'Sachi' Escobar (técnico colombiano de Universidad Católica de Ecuador) y con el 'Trencito' Valencia que juega en Delfín de Manta, y tocábamos ese tema, que por más que uno se ponga a ver partidos, o por más que lea o dirija el trabajo de los jugadores por internet, no deja de ser difícil porque ni siquiera se puede salir a la esquina a trotar. Es muy duro. Mi rutina normal era levantarme a las 5:30 a.m., a las 7:00 me iba para el club y regresaba al mediodía; en la tarde volvía a entreno y organizaba los viajes, las concentraciones y todo lo demás. Y cambiar radicalmente y estar encerrados, no es fácil; lo bueno es que está uno con la familia y lo puede pasar un poco. A 'Sachi' se le hace más difícil porque está solo, su familia permanece en Colombia, entonces todo se le dificulta.

¿Qué ha hecho ahora que el fútbol no le dejaba hacer?
Lo mejor que me ha podido pasar es poder disfrutar a Mariana, mi hija, que va a cumplir 2 años. Con Valentina no tuve esa oportunidad porque en esos momentos tenía todas las selecciones, la Sub 20, la Sub 17 y la Sub 15. Los viajes y las concentraciones no me dieron esa posibilidad. Ahora estoy compartiendo al máximo con mi señora y mi hija.

¿Se ha metido la cocina a preparar algo?
Sí, entro a la cocina, pero a buscar algo de comer (risas), porque yo no sé cocinar. Por fortuna, están mi señora y mi suegra porque donde no estuvieran, no sé que pasaría.

¿Qué se ha dicho en Ecuador de las opciones de reanudar el torneo?
No hay nada claro; en un comienzo se pensó en jugar a puerta cerrada, pero es complicado porque uno lo piensa dos veces a la hora de ir a un aeropuerto, a un estadio, o a un hotel sin saber realmente lo que pueda pasar. Hasta que no se normalice todo o no haya una vacuna para el coronavirus, no lo veo tan fácil.

¿Esto va a llamar a que haya más humildad en el fútbol?
Esto es una lección para todos en todos los ámbitos; debemos darnos cuenta de lo que es esto, hoy día todo el mundo está encerrado, el poder no le sirve a nadie porque todo el mundo tiene temor. Lo que está pasando nos va a servir, hoy todos somos iguales; de qué sirve tener algo y no poderlo disfrutar, el que tiene finca no la puede disfrutar, el que tiene un avión no puede viajar en él y a los que nos gusta estar en una cancha tampoco podemos estar en ella; después de esto vendrán cambios en todos los sentidos.

Datos

Además de Eduardo Lara, en Ecuador hay otros dos técnicos colombianos: Santiago Escobar en Universidad Católica, y José 'Cheché' Hernández, en Técnico Universitario.

Lara llegó este año a El Nacional después de una larga carrera en equipos colombianos, y en selecciones Colombia y la de El Salvador.

Hasta el momento de la suspensión del torneo por el coronavirus, en Ecuador se habían jugado cinco fechas.

El líder es el equipo de 'Cheché' Hernández con 11 puntos; el del 'Sachi' Escobar va tercero con 8 y un partido menos, y el onceno de Lara marcha noveno con 5 unidades y un partido pendiente.

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