El pais
SUSCRÍBETE

China acaparó protagonismo y polémicas dentro y fuera de las pistas

Ni Estados Unidos, ganador de las Olimpiadas en Londres, se libró de las polémicas, pues cuando se supo que los uniformes de sus atletas eran fabricados en China se desató una gran controversia.

12 de agosto de 2012 Por: EFE - El País

Ni Estados Unidos, ganador de las Olimpiadas en Londres, se libró de las polémicas, pues cuando se supo que los uniformes de sus atletas eran fabricados en China se desató una gran controversia.

La delegación china que participó en Londres 2012 logró en muchas jornadas robar el protagonismo de los Juegos, siendo actor principal en muchas controversias y algunos de los momentos más mediáticos de la fiesta olímpica, como la dramática caída de Liu Xiang o los 50 últimos metros de "infarto" de Ye Shiwen.Mucho dio que hablar, por ejemplo, la descalificación de las jugadoras Wang Xiaoli y Yu Yang, cabezas de serie número uno en el dobles femenino de bádminton, por "dejarse ganar", una medida que afectó a otras tres parejas asiáticas y acabó retirando de cuartos de final a la mitad de las competidoras.Días después, cuando en España se barajaba la posibilidad de que su selección de baloncesto perdiera ante Brasil para evitar a EEUU en la semifinal, el recuerdo de Wang y Yu (quien anunció su retirada por el disgusto) estaba muy presente.China ya había estado en el candelero días antes, cuando la nadadora Ye Shiwen, de 16 años, fue acusada por entrenadores estadounidenses y algunos medios, sin pruebas fehacientes, de doparse para conseguir nadar más rápido incluso que Ryan Lochte en los 50 metros finales del 400 estilos que ganó con récord mundial.Ye fue la estrella de los primeros días en los Juegos, primero por su sensacional oro, que repitió en los 200, pero también por el aluvión de deportistas, técnicos y periodistas que o bien salieron en su defensa o bien insistieron en las dudas sobre su rendimiento.Otra polémica en torno a los deportistas chinos la protagonizó la saltadora de trampolín Wu Minxia, que logró dos oros en Londres pero que saltó a las páginas de los diarios al saberse que su familia le había ocultado la muerte de dos de sus abuelos y el cáncer de su madre para que no afectara a su rendimiento.En China, ello trajo muchas críticas por el duro sistema deportivo estatal, que aparta a los atletas de elite de sus familias durante años y a veces se obsesiona por el oro."Los atletas han sido separados de sus familias y del mundo real. Se les deja en la oscuridad, aunque miembros de su hogar estén en situación crítica o mueran", comentaba al respecto el diario "Oriental Morning Post".Mientras China se debatía en la conveniencia o no de tratar a sus deportistas como máquinas, llegaba el 7 de agosto una de las imágenes imborrables de los Juegos, cuando el corredor Liu Xiang, que ya venía de fracasar estrepitosamente en Pekín 2008, se caía en la primera valla de la primera serie.La imagen de Liu recorriendo la pista a la pata coja, dando un "beso de despedida" a una de las vallas y siendo retirado en silla de ruedas superó la pesadilla de Pekín (donde una lesión en el mismo pie le sacó llorando del estadio) y dio mucho que hablar en China, donde hay quien asegura que todo son trucos publicitarios del vallista, ya acabado, para mantener su fama de cara a los publicistas.Otra controversia china en el atletismo tuvo como protagonista a la lanzadora de martillo Zhang Wenxiu, que ya celebraba un bronce en la especialidad cuando los jueces, a última hora, corrigieron una nota de su rival Betty Heidler que relegó a la oriental a la cuarta posición, algo que fue muy protestado por la delegación asiática.También hubo polémica por la primera medalla olímpica de una tibetana en la historia, en 20 kilómetros marcha, mientras activistas tibetanos y fans chinos la animaban al unísono en los alrededores del Palacio de Buckingham, una carrera que en China no se emitió en directo quizá para eliminar imágenes con banderas independentistas del Tíbet que portaban algunos aficionados.Las banderas a veces dividen, y así pasó en los primeros días de la competición, cuando la ciudad de Londres retiró una enseña de Taiwán en Regent Street por presiones de China.O cuando los fans del gigante asiático se quejaron por que la bandera china fuera colocada debajo de la surcoreana en la ceremonia de entrega de medallas de los 200 metros libre, donde el chino Sun Yang y el surcoreano Park Tae-hwan habían hecho el mismo tiempo y compartían la plata.

AHORA EN Deportes