La ley (seca) es la ley

Durante los últimos siete años, el promedio de muertes en Cali, durante el día de la madre, ha sido 15. De igual forma, en estos mismos años se ha registrado un promedio de más de 600 riñas.

Una barbaridad. Resulta difícil de entender que la jornada que debía ser la más alegre y festiva sea la más luctuosa. Pero así es desde hace años.
Desde que mi esposa hizo el internado en el Hospital Universitario del Valle, a inicios de los 90, el día más temido en ese centro de salud era, precisamente, el de la madre. Ninguno lo igualaba. Ni la Feria, ni el año nuevo.

Gloria H sostiene que ese fenómeno se explica en que esta sociedad ha endiosado a las madres. Y las tiene en un pedestal, como si no fueran seres humanos. Y resulta que sí lo son. Y cometen errores, explica la psicóloga.

Entonces, de acuerdo con esa hipótesis, el día de la madre afloran los resentimientos y las rencillas familiares causadas por los errores maternos. Y por ejemplo, el hijo que se ha sentido menos querido por su mamá, envalentonado por unos buenos aguardientes, saca a flote el resentimiento que ha incubado por años.

Sea por esta o por cualquier razón, en Cali, Colombia el día de la madre se nos volvió de alto riesgo.

No debería ser así. La gente debería comportarse de manera civilizada e ingerir alcohol de forma mesurada. Y no armar trifulca en un día que debe estar dedicado a que la familia comparta un momento especial. Pero eso no ocurre.

Y cuando la gente no se sabe comportar, la autoridad debe intervenir. Para eso está. Por ello, respaldo la decisión de la Alcaldía de Cali de decretar la ley seca desde las 10 a.m. de mañana hasta el martes próximo.

Muchas personas están furiosas con esta medida que tildan de exagerada. Pues me da mucha pena, pero en lugar de rabia lo que nos debería producir esa decisión es vergüenza.

Vergüenza de que no sepamos comportarmos como seres medianamente civilizados y que tengan que prohibirnos la ingesta de alcohol para que no nos matemos como animales salvajes.

Entiendo la preocupación del Alcalde y del Comandante de la Policía por el aumento que este año ha experimentado la cifra de homicidios en la ciudad. La tendencia a la baja que se venía viendo, en los dos últimos meses se revirtió. En abril se presentaron 107 homicidios, 11 casos más que en el mismo mes del año pasado. La cifra representa un aumento del 11,4 %.

Ante este panorama, sería una irresponsabilidad que las autoridades no hicieran nada para evitar que se produzca un desangre este fin de semana.

No se necesita ser Einstein para saber que el alcohol es un gran potencializador de la violencia. Y al restringirlo, lo más probable es que la violencia disminuya.

Entiendo la molestia de los dueños de los estancos, los restaurantes y de los establecimientos nocturnos, para quienes el día de la madre es una buena oportunidad de aumentar sus ventas.

Pero ningún derecho está por encima del derecho a la vida. Por eso hay que anteponerlo a cualquier otro.

Este año la decisión está tomada y espero que no la vayan a reversar. Pero si queremos evitar que el año entrante la vuelvan a adoptar, el camino es muy fácil: no nos comportemos como las peores bestias este fin de semana.

Si ello ocurre, a lo mejor el próximo día de la madre las autoridades no tendrán que llegar al extremo que tuvieron que adoptar este año.

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