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Infraestructura. El Instituto Nacional de Vías, Invías, está culminando las obras de recuperación de la calzada en el km 89 de la vía Loboguerrero a Lago Calima. Se invirtieron más de $7000 millones en este sector. | Foto: José Luis Guzmán / El País

VIA A BUENAVENTURA

Aparecen nuevos peros a la vía Mulaló - Loboguerrero

Miguel Vargas, gerente del concesionario, explica las razones de esa decisión.

1 de septiembre de 2021 Por: Redacción El País

La futura carretera que comunicará Mulaló con Loboguerrero, considerada la primera vía de 4G y que sería clave para el comercio exterior del Valle y del sur del país, parece que seguirá atascada a pesar de que en días pasados obtuvo la licencia ambiental para su construcción.

El Valle debió esperar cuatro años para que la Anla, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, le diera el visto bueno, y ahora que ya lo recibió, la empresa o concesionario que tiene esa obra bajo su responsabilidad informó que no la hará bajo el argumento de que el proyecto tiene una causal de terminación anticipada por la demora en el otorgamiento de la licencia ambiental.

El acta de inicio de la construcción de la vía Mulaló Loboguerrero se firmó en marzo del 2015 y en agosto del 2017 el concesionario entregó los primeros estudios de impacto ambiental a la Anla.

En agosto del 2019 la autoridad ambiental pidió más estudios a Covimar por las dudas que tenía la comunidad dada la posible afectación al acuífero de Pavas. Los nuevos estudios se entregaron en abril pasado, en ellos, según el concesionario, se ratificó que no había riesgo para el abastecimiento de agua.

La carretera tendrá una extensión de 31,8 kilómetros y cuenta con 16,3 kilómetros en calzada sencilla, 4,2 kilómetros en doble calzada y cinco túneles bidireccionales que suman 11,4 kilómetros.

Asimismo, la obra contempla la construcción de cuatro puentes peatonales, 47 puentes vehiculares, 290 obras hidráulicas, cuatro intersecciones a nivel y desnivel y dos retornos.

Esta intervención tendrá un costo estimado de $2 billones y el concesionario estimó un periodo de construcción de 5 años.

Miguel Vargas es el gerente de Covimar y en diálogo con El País explicó detalles del lío que tiene el proyecto.

¿Qué razones motivaron la petición a la ANI de cancelar anticipadamente el proyecto vial Mulaló – Loboguerrero?
Prácticamente es una sola razón y es que se encuentra configurada una de las causales de terminación anticipada previstas en el contrato de concesión.

En él se prevé unas reglas y una de ellas es que, si pasa un determinado tiempo con el proyecto paralizado, como en efecto ocurrió, sin que fuera otorgada la licencia ambiental, el contrato entraba en causal de terminación.

¿La solicitud de terminación del contrato a la ANI es solo por la demora en la licencia ambiental?

Lo que solicita el concesionario es que como está configurada la terminación anticipada se proceda con la reversión y posterior liquidación del contrato. Esas son las reglas que establece el mismo contrato de concesión suscrito entre las partes, es decir, entre la ANI y Covimar.

¿En qué estado se encuentra el contrato de concesión, luego de que pidieron la terminación anticipada?
Pues mire, el concesionario sigue adelantando las actividades que requiere la ANI para continuar con la ejecución del proyecto y ellas tienen que ver con la gestión predial y ambiental, entre otras, que son las indispensables para que la ANI pueda asumirlas y continuar con la ejecución del proyecto.

¿Definitivamente no les interesa continuar con el contrato de concesión, pese a que se dio el aval de la licencia ambiental?
Sucede que la licencia ambiental no está en firme todavía porque la decisión emitida por la Anla aún es susceptible de ser modificada, revocada o aclarada; pero en todo caso, si existiera una licencia ambiental ejecutoriada, es decir definitiva, dicha situación no modifica la situación actual del contrato, dado que se encuentra inmerso en una causal de terminación anticipada.

¿Por qué cree que la obtención de la licencia no despeja el proyecto de la vía Mulaló-Loboguerrero?

Porque el contrato lleva casi 4 años suspendido, según consta en las dos declaraciones que ha efectuado un panel de Amigables Componedores. La configuración de una de las causales de terminación del contrato y como le digo hace parte de las reglas pactadas entre las partes (la ANI y el concesionario).

¿Cuántos recursos han invertido hasta ahora en estudios y diseños?
Hasta ahora se ha invertido, aproximadamente, durante la etapa de preconstrucción, $298.000 millones para estudios y diseños, gestión ambiental, gestión de redes y el respectivo fondeo de las subcuentas del proyecto.

¿Habría alguna manera o condición para que se retome el proyecto?

Mire, configurada la causal de terminación anticipada del contrato, el proyecto no podría ser ejecutado por Covimar. Corresponderá a la Agencia Nacional de Infraestructura definir si continúa con su ejecución.

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